por Julio el de La Cruz
SUSTOTE. Dicen que hay crisis, pero en pleno martes por la noche el restaurante Mochomos estaba a dos tercios de su capacidad. Les platico lo que dice uno de los comensales para dimensionar el riesgo que se corrió en el operativo de la Marina y la Gendarmería para detener ahí al narco Ángel Humberto Chávez Gastélum. “Don Angel” estaba en el privado cuando los agentes se hicieron pasar por clientes y esperaron en una mesa el momento de entrar a pedir la rendición del capo, escasamente armado en ese lugar, pero con “guaruras” en el exterior. Por fortuna se rindió, “si no… ¡imagínate la balacera…!”. El operativo fue tan secreto como impecable y con efectividad quirúrgica. Y lo mejor: por las prisas no cobraron la cuenta.
RETO. Que el cantante norteño Gerardo Ortiz tiene prohibido interpretar sus famosos narco corridos este sábado en la Plaza Santa María, dice el secretario de Gobierno municipal, Apolinar Casillas. La pregunta es qué pasará si Ortiz, acostumbrado a los líos, viola la disposición ¿a poco van a mandar al jefe policiaco Juan Luis Ferrusca a cancelar el concierto? Si no puede ni con los “franeleros”.