TESORO. No se le hace justicia a la Ruta del Arte, Queso y Vino, aun y cuando es potencial turístico y deja alta derrama económica a los municipios de la región como Ezequiel Montes, Tequisquiapan, El Marqués, Colón y San Juan del Río.
OLVIDO. Resulta que para llegar a cualquiera de las tantas vinícolas con las que cuentan hay que incorporarse a la carretera estatal 200 (ahí pasando el Aeropuerto Intercontinental de Querétaro), que apenas cuenta con carril de ida y vuelta. Está muy deteriorada, vieja, en el olvido. Está que da vergüenza para los visitantes que pronto, en la “nueva normalidad”, regresarán a esa zona los fines de semana o en vacaciones y es tiempo para proyectar su arreglo.
PENDIENTES. La mejora debería ser una tarea prioritaria de la reactivación económica para las secretarías de Turismo de Hugo Burgos y de Desarrollo Sustentable, que encabeza Marco del Prete, y de la Comisión Estatal de Infraestructura de Fernando González.
