/ domingo 6 de junio de 2021

El cronista sanjuanense|1821. Capitulación de San Juan del Río

Sin haberse disparado un solo tiro, los realistas se vieron reducidos a cuatrocientos hombres y entonces el comandante José María Novoa solicitó una capitulación que le fue concedida inmediatamente, siendo casi igual a la que acababa de ajustarse en Valladolid (Morelia) con el comandante virreinal Manuel Rodríguez de Cela. La capitulación de San Juan del Río a favor de la Independencia ocurrió el miércoles 6 de junio de 1821, después de un sitio de quince días.

Tras la rendición de las fuerzas virreinales, Novoa se retiró a México con los cuatrocientos que habían permanecido fieles y los insurgentes tomaron posesión del pueblo al día siguiente, donde hallaron varias piezas de artillería, muchos fusiles, parque abundantísimo y los fondos depositados en las cajas de la Hacienda pública.

El documento en el que se firmó la capitulación de San Juan del Río, que resguarda el Archivo Histórico de la Secretaría de la Defensa Nacional, dice lo siguiente:

Junio 6 1821

Capitulación celebrada entre el Sr. Coronel Don Luis Quintanar, jefe de las fuerzas que sitian el pueblo de San Juan del Río y el Sr. Coronel D. José Ma. Novoa, jefe del expresado pueblo.

Artículo 1°. = A toda la guarnición se le propondrá que tome libremente el partido de Independencia o el de retirarse a México, la que quiera voluntariamente. Una y otra llevará sus armas, caballos y equipo; y la que marche tres cajones de municiones: nada sobrante de armas, caballos y monturas, a menos que no sean de los señores oficiales, pues las armas y caballos que corresponden a ellos se llevará la guarnición, sean cuantos fueren; pero el sobrante de otras armas y caballos que corresponde a los cuerpos y no a individuos particulares, deberán entregarse. La propuesta se hará por el que comisione el jefe de las tropas sitiadoras.

Artículo 2°. = Las armas, caballos, monturas y equipo que pertenece a la tropa que ya se ha reunido, a los sitiadores se entregará al comisionado recibirlo.

Artículo 3°. = Se entregará toda la artillería, sus municiones y …

Artículo 4°. = La fuerza que se retire a México por el Camino Real de este pueblo para aquella capital, no hostilizará ni será hostilizada en su marcha, y al efecto se levantará el sitio al amanecer y el camino de México estará expedito y la salida la presenciará uno o dos jefes de la tropa sitiadora para evitar todo insulto.

Artículo 5°. = El pueblo podrá franquear a la parte de la guarnición que marche, los bagajes que necesita y en caso que falten los facilitarán los sitiadores.

Artículo 6°. = A ningún vecino del pueblo de San Juan del Río se molestará por sus opiniones políticas.

Artículo 7°. = El pueblo quedará desocupado por la guarnición entre tres y cuatro de la tarde del expresado día en mañana. Fin del presente.

San Juan del Río 6 de junio de 1821.

Luis Quintanar [rúbrica] - José María Novoa [rúbrica]

Entre las capitulaciones documentadas más significativas está la de San Juan del Río, llevada a cabo precisamente por un personaje nacido en esta tierra: Luis Quintanar, coronel que, siendo del gobierno virreinal, se adhirió al Ejército Trigarante al rendirse en Valladolid. La capitulación de San Juan del Río fue la única hecha por Quintanar bajo el mandamiento de Agustín de Iturbide.

Con San Juan del Río bajo control trigarante, Querétaro quedaba sin posibilidad de recibir refuerzos desde México, con lo que la toma de ésta, la tercera ciudad más importante del reino de la Nueva España, ocurriría en cualquier momento.

Iturbide, al frente del grueso ejército, se había movido de Valladolid en dirección a San Juan del Río, a donde llegó el día siguiente de la capitulación, el 7 de junio, instaló su cuartel y permaneció en el pueblo por quince días naturales, del jueves 7 y hasta el jueves 21 de junio de 1821. El recibimiento que se le hizo a Iturbide debió ser eufórico y alegre pues se juntaron en San Juan, además de la mayor parte del Ejército Trigarante, los altos jefes del mismo: el propio Iturbide, Bustamante, el sanjuanense Quintanar, el coronel Parres, otros oficiales de alto rango, además de Guadalupe Victoria.

El día de hoy, 6 de junio de 2021, se cumple el bicentenario de este importante hecho histórico que forma parte de la última etapa de la Guerra de Independencia y que abonó, en definitiva, a lograr su consumación. San Juan del Río era vital para las fuerzas independentistas pues es garganta de toda tierra adentro, el cruce de todos los caminos y desde luego que lo fue para lograr la libertad de todos los mexicanos.

Sin haberse disparado un solo tiro, los realistas se vieron reducidos a cuatrocientos hombres y entonces el comandante José María Novoa solicitó una capitulación que le fue concedida inmediatamente, siendo casi igual a la que acababa de ajustarse en Valladolid (Morelia) con el comandante virreinal Manuel Rodríguez de Cela. La capitulación de San Juan del Río a favor de la Independencia ocurrió el miércoles 6 de junio de 1821, después de un sitio de quince días.

Tras la rendición de las fuerzas virreinales, Novoa se retiró a México con los cuatrocientos que habían permanecido fieles y los insurgentes tomaron posesión del pueblo al día siguiente, donde hallaron varias piezas de artillería, muchos fusiles, parque abundantísimo y los fondos depositados en las cajas de la Hacienda pública.

El documento en el que se firmó la capitulación de San Juan del Río, que resguarda el Archivo Histórico de la Secretaría de la Defensa Nacional, dice lo siguiente:

Junio 6 1821

Capitulación celebrada entre el Sr. Coronel Don Luis Quintanar, jefe de las fuerzas que sitian el pueblo de San Juan del Río y el Sr. Coronel D. José Ma. Novoa, jefe del expresado pueblo.

Artículo 1°. = A toda la guarnición se le propondrá que tome libremente el partido de Independencia o el de retirarse a México, la que quiera voluntariamente. Una y otra llevará sus armas, caballos y equipo; y la que marche tres cajones de municiones: nada sobrante de armas, caballos y monturas, a menos que no sean de los señores oficiales, pues las armas y caballos que corresponden a ellos se llevará la guarnición, sean cuantos fueren; pero el sobrante de otras armas y caballos que corresponde a los cuerpos y no a individuos particulares, deberán entregarse. La propuesta se hará por el que comisione el jefe de las tropas sitiadoras.

Artículo 2°. = Las armas, caballos, monturas y equipo que pertenece a la tropa que ya se ha reunido, a los sitiadores se entregará al comisionado recibirlo.

Artículo 3°. = Se entregará toda la artillería, sus municiones y …

Artículo 4°. = La fuerza que se retire a México por el Camino Real de este pueblo para aquella capital, no hostilizará ni será hostilizada en su marcha, y al efecto se levantará el sitio al amanecer y el camino de México estará expedito y la salida la presenciará uno o dos jefes de la tropa sitiadora para evitar todo insulto.

Artículo 5°. = El pueblo podrá franquear a la parte de la guarnición que marche, los bagajes que necesita y en caso que falten los facilitarán los sitiadores.

Artículo 6°. = A ningún vecino del pueblo de San Juan del Río se molestará por sus opiniones políticas.

Artículo 7°. = El pueblo quedará desocupado por la guarnición entre tres y cuatro de la tarde del expresado día en mañana. Fin del presente.

San Juan del Río 6 de junio de 1821.

Luis Quintanar [rúbrica] - José María Novoa [rúbrica]

Entre las capitulaciones documentadas más significativas está la de San Juan del Río, llevada a cabo precisamente por un personaje nacido en esta tierra: Luis Quintanar, coronel que, siendo del gobierno virreinal, se adhirió al Ejército Trigarante al rendirse en Valladolid. La capitulación de San Juan del Río fue la única hecha por Quintanar bajo el mandamiento de Agustín de Iturbide.

Con San Juan del Río bajo control trigarante, Querétaro quedaba sin posibilidad de recibir refuerzos desde México, con lo que la toma de ésta, la tercera ciudad más importante del reino de la Nueva España, ocurriría en cualquier momento.

Iturbide, al frente del grueso ejército, se había movido de Valladolid en dirección a San Juan del Río, a donde llegó el día siguiente de la capitulación, el 7 de junio, instaló su cuartel y permaneció en el pueblo por quince días naturales, del jueves 7 y hasta el jueves 21 de junio de 1821. El recibimiento que se le hizo a Iturbide debió ser eufórico y alegre pues se juntaron en San Juan, además de la mayor parte del Ejército Trigarante, los altos jefes del mismo: el propio Iturbide, Bustamante, el sanjuanense Quintanar, el coronel Parres, otros oficiales de alto rango, además de Guadalupe Victoria.

El día de hoy, 6 de junio de 2021, se cumple el bicentenario de este importante hecho histórico que forma parte de la última etapa de la Guerra de Independencia y que abonó, en definitiva, a lograr su consumación. San Juan del Río era vital para las fuerzas independentistas pues es garganta de toda tierra adentro, el cruce de todos los caminos y desde luego que lo fue para lograr la libertad de todos los mexicanos.