/ jueves 26 de agosto de 2021

El Teatro de la República

PRIMER ACTO. CORRUPCIÓN VS ABUSO DE PODER. Esa es la cuestión. Para quienes admiran a AMLO es cierta su narrativa del combate a la corrupción en el caso de Ricardo Anaya. Quienes repudian a la 4T, aún sin ser anayistas, ven en el lance de la FGR un acto de evidente abuso de poder con fines políticos orquestado desde Palacio Nacional. Ellos creen a pié juntillas la narrativa de la persecución política. Y así están los tendidos. No estamos de un lado ni del otro, sin embargo, es evidente que al queretano se le está midiendo con una vara muy larga en comparación con lo que ha ocurrido con otros personajes señalados de lo mismo por los mismos. Y la única explicación a este trato diferenciado parece ser la vigencia y activismo político de Ricardo Anaya.

SEGUNDO ACTO. DESATINO. En ese tenor, nos parece que la embestida contra el ex candidato presidencial es un desatino político, que implica una desigual aplicación de la ley con la evidente intención de desbrozar un camino político. Una historia curiosa y paradójicamente idéntica a la que sufrió AMLO con aquel malogrado desafuero que le armó Fox en el 2005. El entonces ejecutado es hoy el verdugo. Por eso dicen que la política es una tómbola. Y al igual que hace 16 años, todo indica que Anaya va a dar su pelea y eso es actuar adecuadamente. No lo van a dejar en paz y su única defensa es resistir. Y si resiste crece políticamente. Por lo que podríamos estar viendo la génesis del AMLO del Presidente López Obrador. Por su parte, la 4T debe prever que esta batalla jurídico-político-mediática la puede perder en cualquiera de los siguientes tres escenarios: si se rajan y archivan el asunto, Anaya habrá tenido razón; si lo procesan pero no lo detienen, Anaya gana; y, si lo detienen, Anaya obtendría prestigio y apoyos internacionales y sería un preso político que encarnaría la creciente resistencia a la 4T. El problema es que además del Ejecutivo la que pierde también es la política mexicana, puesto que ya es un carnaval de confrontaciones, ajustes de cuentas y golpes bajos, cuyos efectos lamentablemente están pervirtiéndolo todo. SCJN, INE, organismos autónomos y hasta universidades como la UDLA. Tristes efectos de la falta de política y el exceso de rencor.

TERCER ACTO. CÁMARA DE DIPUTADOS. Con la reciente validación de la elección de diputaciones plurinominales por parte del INE, ya tenemos los números definitivos en la integración de la Cámara de Diputados, colegio parlamentario que exhibe las preferencias políticas de la nación. Las 500 curules del Palacio Legislativo de San Lázaro quedan distribuidas de la siguiente manera: MORENA 198 (39.6%); PAN 114 (22.8%); PRI 70 (14%); PVEM 43 (8.6%); PT 37 (7.4%); MC 23 (4.6%); y, PRD 15 (3%).

TRAS BAMBALINAS. CHIVO EXPIATORIO. Para taparle el ojo al macho la FGR va contra Carlos Treviño, ex Director General de PEMEX al final del sexenio pasado. Para que vean que no todo es contra Anaya se lanzan contra un pez gordo de la última administración tricolor. Todo indica que el chivo expiatorio del peñismo será Treviño, porque lo de Rosario Robles es personal y lo de Lozoya mediático. Ya duerme Videgaray.


Notario Público 19 de Querétaro.

ferortiz@notaria19qro.com

PRIMER ACTO. CORRUPCIÓN VS ABUSO DE PODER. Esa es la cuestión. Para quienes admiran a AMLO es cierta su narrativa del combate a la corrupción en el caso de Ricardo Anaya. Quienes repudian a la 4T, aún sin ser anayistas, ven en el lance de la FGR un acto de evidente abuso de poder con fines políticos orquestado desde Palacio Nacional. Ellos creen a pié juntillas la narrativa de la persecución política. Y así están los tendidos. No estamos de un lado ni del otro, sin embargo, es evidente que al queretano se le está midiendo con una vara muy larga en comparación con lo que ha ocurrido con otros personajes señalados de lo mismo por los mismos. Y la única explicación a este trato diferenciado parece ser la vigencia y activismo político de Ricardo Anaya.

SEGUNDO ACTO. DESATINO. En ese tenor, nos parece que la embestida contra el ex candidato presidencial es un desatino político, que implica una desigual aplicación de la ley con la evidente intención de desbrozar un camino político. Una historia curiosa y paradójicamente idéntica a la que sufrió AMLO con aquel malogrado desafuero que le armó Fox en el 2005. El entonces ejecutado es hoy el verdugo. Por eso dicen que la política es una tómbola. Y al igual que hace 16 años, todo indica que Anaya va a dar su pelea y eso es actuar adecuadamente. No lo van a dejar en paz y su única defensa es resistir. Y si resiste crece políticamente. Por lo que podríamos estar viendo la génesis del AMLO del Presidente López Obrador. Por su parte, la 4T debe prever que esta batalla jurídico-político-mediática la puede perder en cualquiera de los siguientes tres escenarios: si se rajan y archivan el asunto, Anaya habrá tenido razón; si lo procesan pero no lo detienen, Anaya gana; y, si lo detienen, Anaya obtendría prestigio y apoyos internacionales y sería un preso político que encarnaría la creciente resistencia a la 4T. El problema es que además del Ejecutivo la que pierde también es la política mexicana, puesto que ya es un carnaval de confrontaciones, ajustes de cuentas y golpes bajos, cuyos efectos lamentablemente están pervirtiéndolo todo. SCJN, INE, organismos autónomos y hasta universidades como la UDLA. Tristes efectos de la falta de política y el exceso de rencor.

TERCER ACTO. CÁMARA DE DIPUTADOS. Con la reciente validación de la elección de diputaciones plurinominales por parte del INE, ya tenemos los números definitivos en la integración de la Cámara de Diputados, colegio parlamentario que exhibe las preferencias políticas de la nación. Las 500 curules del Palacio Legislativo de San Lázaro quedan distribuidas de la siguiente manera: MORENA 198 (39.6%); PAN 114 (22.8%); PRI 70 (14%); PVEM 43 (8.6%); PT 37 (7.4%); MC 23 (4.6%); y, PRD 15 (3%).

TRAS BAMBALINAS. CHIVO EXPIATORIO. Para taparle el ojo al macho la FGR va contra Carlos Treviño, ex Director General de PEMEX al final del sexenio pasado. Para que vean que no todo es contra Anaya se lanzan contra un pez gordo de la última administración tricolor. Todo indica que el chivo expiatorio del peñismo será Treviño, porque lo de Rosario Robles es personal y lo de Lozoya mediático. Ya duerme Videgaray.


Notario Público 19 de Querétaro.

ferortiz@notaria19qro.com