Se va el 2017 cuando apenas comienza la competencia electoral, hay precandidatos a la presidencia de la República que se autoengañan, pretendiendo engañarnos a los demás con el enredado argumento de que andan dirigiendo mensajes a diestra y siniestra en medios de comunicación electrónicos, con sus “anuncios” que solamente van dirigidos a los militantes de los partidos que los postulan.
Con este tiempo ganado los precandidatos inundarán la temporada de fin de año con sus patrañas de siempre, vendiéndose como honestos, salvadores y tipos frescos como cualquier habitante del país.
Las intercampañas que estamos viviendo nos permiten ir conociendo un poco a los precandidatos y además hartarnos antes de tiempo; ya vendrá el momento de la campaña y escuchar sus propuestas para tener un país mejor.
En lo local, los acelerados pueden ir tomando un respiro y replantearse lo que pretendan buscar o lo que les dejen los peces más grandes en las negociaciones.
Así es que el tema de las presidencias municipales y diputaciones locales, vayan tomando su tiempo y continúen tratando de engalanar a sus posibles electores.
Los partidos políticos y quienes los controlan definirán a los ganadores de la oportunidad para contender por un cargo de elección popular y sobre todo para los “amigos” que se llevaran las pluris. En el tema de los independientes es un mundo aparte ya que la aventura en la que están embarcados está costando más trabajo que el imaginado.
Según cifras oficiales del Instituto Electoral y sobre todo de la legislación electoral, es más fácil fundar un partido político, que intentar ser candidato independiente ya que la cantidad de firmas que hay que reunir no es para nada comparable con el porcentaje de votación para obtener el registro.
Los independientes en Querétaro, sufrirán seguramente uno de los peores resultados y es que muy difícil les pusieron el reto para lograr los objetivos.
No vamos a los festejos navideños con mensajes y con precampañas de candidatos prometiendo lo de siempre, más empleo, mejor ingreso y honestidad; promesas muy manoseadas y que los electores creen poco.
Expediente Q, regresa con el 2018 y toma unos días de descanso, muchas gracias por la atención.
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