2018 el año en el que los mexicanos vamos a las urnas para votar por la persona que será Presidente de la República, no han iniciado de manera formal las campañas y ya nos sentimos muy decepcionados (al menos yo) de lo que estamos escuchando y viendo del menú de precandidatos a Jefe del Ejecutivo.
Yo creo que ahí radica el problema, que son precandidatos y que no quisieron dejar pasar la oportunidad de aprovechar los tiempos de radio y televisión y redes sociales para dizque enviar mensajes a los miembros de sus respectivos partidos políticos; efectivamente todos escuchamos los mensajes pero no van dirigidos a nosotros, van exclusivamente a los militantes de los partidos y a los miembros de los consejos de los institutos políticos. Aunque todos los ciudadanos los veamos, no son para la gran mayoria ¡Ay aja! ya desde ahí nos engañan o al menos eso pretenden.
Lo más destacable en este momento de intercampaña es que: uno de los precandidatos fue a dejar a su pequeño hijo a la escuela y subió a sus redes sociales el evento; tal vez para el precandidato sea un acto fuera de los común, pero para millones de mexicanos es una obligación y no hay forma de organizarse que llevar a los niños a la escuela y además pasar por ellos, es una cosa de todos los días que no implica mayor desafío, que el tiempo que uno haga al “cole” del chamaco.
Otro de nuestros valientes precandidatos se fue a cortar el cabello y nos platicó todo lo que un humano normal puede platicar con su peluquero o con su estilista preferido sin que tampoco implique un trabajo mayo o empeño riesgoso.
Nuestro tercer precandidato tuvo la valentía de comerse una torta y utilizó las manos para comerla, mientras sus seguidores y acompañantes tímidamente querían utilizar cubiertos, otra actividad normal y sin problemas que realizan millones de habitantes de este país.
Lo cierto es que en periodo de intercampañas no podremos escuchar propuestas y mucho menos debates reales entre los que buscan gobernar a este país y eso sin contar que uno de los independientes nos mostró, cómo le adaptaron en su silla de montar a caballo, un dispositivo para fijar una Ipad para cabalgar y tuitear al mismo tiempo; labores que un estadista tiene que realizar obviamente.
Las intercampañas nos dejarán un pesimo sabor de boca a los electores y seguramente nos mostrarán candidatos desgastados por tanta “ñoñería” sin sustancia. Espero ya acaben pronto.
De Rebote
Con la vista del Presidente Enrique Peña Nieto a Querétaro, muchos delegados federales, presidentes municipales y legisladores aprovecharon la ocasión para tomarse la foto y solamente pocos tuvieron la oportunidad de dialogar brevemente para seguir en su “ánimo”.
@aolverar
