Le digo que la famosa consulta para juzgar a actores políticos del pasado es una patraña y solamente servirá para que el estado mexicano derroche más de 500 millones de pesos.
Resulta que la consulta para juzgar a “ex presidentes”, al menos así lo vende el gobierno y sus porristas (o sea los que son pro gobiernistas) es una perdedera de tiempo. Aquí, en Querétaro, ya sirvió para que otros a los que les hace falta un pretexto se tiren a la flojera con el argumento de sus derechos laborales.
Resulta que las y los 25 diputados junto con la plantilla laboral que conforman la legislatura de Querétaro se fueron de vacaciones (así se la han vivido) con el pretexto de su periodo vacacional legal y que casualmente coincide con la consulta popular y pues hay veda electoral.
Los legisladores se fueron de vacaciones porque como no hay personal, entonces no hay que les prepare el café, les saque copias o les arme un escrito para algún exhorto, que es lo único que saben hacer de manera repetida. De legislar luego hablamos.
La consulta para ver si la autoridad federal puede aplicar la ley en contra de algún actor político del pasado ya trajo consecuencias en el pueblo. Y es que, aprovechando la veda, resulta que pocos funcionarios públicos quieren salir a trabajar y que los vean; deberían de aprender al presidente de México, que todos los días hace lo que mejor le sale: estar presente en su conferencia mañanera, además de comer garnachas en los pueblos y comunidades del país.
Con 98 de los 100 compromisos que hizo en campaña para el país, el presidente López Obrador se da la lujo hasta de estar escribiendo un libro, que pronto saldrá a la luz pública. Aquí alcanza el tiempo hasta para que se vayan de vacaciones y regresen a entregar el cargo los eficientes y siempre trabajadores legisladores y legisladoras queretanas.
De rebote
Por cierto que ahora que hacen afanosamente esfuerzos para revivir los casos de presunto espionaje por el caso Pegasus, en Querétaro han quedado en el olvido esos episodios de escuchas telefónicas que han dado tanto de qué hablar ¿Será que aquí operó el software?
@adanolverar