Nuestro querido Estado de Querétaro es orgullosamente una de las entidades federativas más seguras del país. Tenemos el honor de ocupar el 1er lugar nacional en el ranking nacional del Sistema de Justicia Penal de México Evalúa y nuestras policías son de las mejores evaluadas por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, lo cual no es fruto de la casualidad sino de una cuidadosa y estructurada estrategia y de la adecuada articulación de políticas públicas bien planteadas.
La semana pasada el gobernador Mauricio Kuri presentó el Programa Estatal de Seguridad 2022-2027, que será el documento rector de políticas públicas en materia de seguridad pública. Entre sus principales propósitos se encuentran preservar la paz y la seguridad de las familias queretanas y garantizar que en nuestro estado “quien la hace, la paga”.
Querétaro es un estado seguro por dos razones principales: por un lado, debido a una buena política de prevención conjugada con policías municipales y estatales fuertes, certificadas en desempeño y en controles de confianza. Por otro lado, debido a su fortaleza institucional en materia de procuración de justicia, a la buena coordinación institucional en relación con la justicia penal y a una proyección adecuada de recursos financieros.
Retomando estos pilares, la estrategia presentada contiene aspectos innovadores: nuevas academias de policía para formar más y mejores elementos; hacer énfasis en la prevención de la violencia y erradicar la violencia contra las mujeres y la violencia familiar; y un nuevo modelo de policía de proximidad, donde las y los policías sean cercanos a la comunidad y generen confianza. Este último aspecto es uno de los más ambiciosos del programa.
La policía de proximidad convertirá a los elementos en primeros respondientes y dará realce a su función como primer punto de contacto de los hechos delictivos con el sistema de justicia. También serán agentes de justicia cotidiana que colaboren con la sanción de faltas administrativas y mediadores para la pronta resolución de conflictos entre vecinos.
Otro aspecto innovador será la implementación del trabajo comunitario como un factor de reinserción, implementado de la mano de organizaciones de la sociedad civil. Con ello se cierra el círculo virtuoso de esta estrategia para garantizar todos los objetivos en materia de seguridad.
En Querétaro no nos hemos cruzado de brazos frente al intento del gobierno federal por debilitar las policías locales para fortalecer su ineficiente Guardia Nacional. Sin recursos por parte de la federación, muchas alcaldías se han visto forzadas a destinar recursos de FORTAMUN -el fondo destinado para infraestructura y servicios públicos- para garantizar la seguridad pública.
Como legislador federal seguiré impulsando el retorno del FORTASEG y que se destinen más recursos a las policías locales. Pero aún con recursos y una buena estrategia, es tarea de todos resolver la crisis de respeto cívico y de valores. Por ello desde aquí convoco a todos los queretanos a que juntos construyamos una sociedad donde el respeto a nuestros semejantes sea la base de la seguridad y cuidarnos entre todos, una tarea compartida.
