/ viernes 21 de diciembre de 2018

Humanitas: arte y pasión

“La persistencia de la memoria” es un enigmático cuadro del pintor surrealista Salvador Dalí, que se encuentra en el museo de Arte Moderno de Nueva York. En este cuadro Dalí evoca una concepción cuasi científica del espacio tiempo. La memoria es un concepto que nos remite a lo temporal, a la relación pasado y presente en la que vivimos, aunque todos hacemos uso de la memoria no sabemos en realidad qué tipo de información contiene, es decir, cuál es su contenido como memoria RAM (memoria de acceso aleatorio) y su capacidad en terabits. El tiempo de la memoria es el tiempo del inconsciente. Es posible que contenga información que nosotros no sabemos que contiene y tendremos que descubrirla a lo largo de nuestra existencia. Platón afirmaba que ya teníamos en el alma el conocimiento de las cosas (la teoría de la reminiscencia) que consistía en recordar lo que ya sabíamos, porque todo lo que existe ya se nos había revelado en el mundo de las ideas, y sería a través del diálogo filosófico como se desvelaría el conocimiento.

En el cuadro de Dalí aparece una extraña figura recostada en la arena, que alude a un rostro posiblemente de su padre; en el fondo un espacio multidimensional, un paisaje marino con las rocas del cabo de Creus, una plancha monolítica, un árbol seco del que penden En esta obra aparecen dos relojes blandos que aluden al tiempo, según Salvador Dalí se inspiró en la teoría de la relatividad de Albert Einstein en la que el tiempo y el espacio no son absolutos sino relativos. Sobre uno de los relojes esta parada una mosca, un insecto maravilloso y enigmático para Dalí; sobre el otro se observa un grupo de hormigas pululando sobre el tiempo o devorándolo en migajas. De acuerdo al recuerdo de Dalí, nos cuenta que estaba cenando en compañía de Gala su esposa, en la casa estudio de Cadaquez, al final de la merienda se percató de cómo un grupo de hormigas se apropiaban de las migajas del pan que estaba en la mesa, las siguió con sigilo y después volvió a su estudio enloquecido, alterado por esa revelación, a pintar sobre los relojes las hormigas del tiempo, que se hicieron un clásico en sus obras. También nos dice que para la figura del cuadro se inspiró en un queso camembert, estos hechos activan cosas en la memoria daliniana, que él llamó a este procedimiento el método paranoico-crítico.

La recurrencia de la memoria daliniana a través del método paranoico-crítico, resulta un sistema de conocimiento que activa imágenes que se tienen guardadas en la memoria o que se perciben por los sentidos, y que producen una nueva interpretación de la realidad que se decanta en una obra de arte. De alguna manera artistas como Dalí parecen que tienen conocimientos e imágenes de cosas que persisten en su memoria, y que en el acto de pensamiento-creación son llevados a la pintura de manera original.

Para el surrealismo el automatismo psíquico era un método de creación y producción, los sueños el camino que conduce al inconsciente (Freud). Llegar a ese inconsciente, explorar sus posibilidades, conocer lo que habita allí, era una de las formas de conocimiento que proponía el movimiento surrealista. Tal vez en ese inconsciente que funciona como memoria, como espacio-tiempo, como contenedor de conocimientos y experiencias, se encuentren todas las sapiencias que hemos guardado a través de muchas vidas.

Aprovechamos este espacio para desearles una feliz navidad y un prospero año 2019.

bobiglez@gmail.com

“La persistencia de la memoria” es un enigmático cuadro del pintor surrealista Salvador Dalí, que se encuentra en el museo de Arte Moderno de Nueva York. En este cuadro Dalí evoca una concepción cuasi científica del espacio tiempo. La memoria es un concepto que nos remite a lo temporal, a la relación pasado y presente en la que vivimos, aunque todos hacemos uso de la memoria no sabemos en realidad qué tipo de información contiene, es decir, cuál es su contenido como memoria RAM (memoria de acceso aleatorio) y su capacidad en terabits. El tiempo de la memoria es el tiempo del inconsciente. Es posible que contenga información que nosotros no sabemos que contiene y tendremos que descubrirla a lo largo de nuestra existencia. Platón afirmaba que ya teníamos en el alma el conocimiento de las cosas (la teoría de la reminiscencia) que consistía en recordar lo que ya sabíamos, porque todo lo que existe ya se nos había revelado en el mundo de las ideas, y sería a través del diálogo filosófico como se desvelaría el conocimiento.

En el cuadro de Dalí aparece una extraña figura recostada en la arena, que alude a un rostro posiblemente de su padre; en el fondo un espacio multidimensional, un paisaje marino con las rocas del cabo de Creus, una plancha monolítica, un árbol seco del que penden En esta obra aparecen dos relojes blandos que aluden al tiempo, según Salvador Dalí se inspiró en la teoría de la relatividad de Albert Einstein en la que el tiempo y el espacio no son absolutos sino relativos. Sobre uno de los relojes esta parada una mosca, un insecto maravilloso y enigmático para Dalí; sobre el otro se observa un grupo de hormigas pululando sobre el tiempo o devorándolo en migajas. De acuerdo al recuerdo de Dalí, nos cuenta que estaba cenando en compañía de Gala su esposa, en la casa estudio de Cadaquez, al final de la merienda se percató de cómo un grupo de hormigas se apropiaban de las migajas del pan que estaba en la mesa, las siguió con sigilo y después volvió a su estudio enloquecido, alterado por esa revelación, a pintar sobre los relojes las hormigas del tiempo, que se hicieron un clásico en sus obras. También nos dice que para la figura del cuadro se inspiró en un queso camembert, estos hechos activan cosas en la memoria daliniana, que él llamó a este procedimiento el método paranoico-crítico.

La recurrencia de la memoria daliniana a través del método paranoico-crítico, resulta un sistema de conocimiento que activa imágenes que se tienen guardadas en la memoria o que se perciben por los sentidos, y que producen una nueva interpretación de la realidad que se decanta en una obra de arte. De alguna manera artistas como Dalí parecen que tienen conocimientos e imágenes de cosas que persisten en su memoria, y que en el acto de pensamiento-creación son llevados a la pintura de manera original.

Para el surrealismo el automatismo psíquico era un método de creación y producción, los sueños el camino que conduce al inconsciente (Freud). Llegar a ese inconsciente, explorar sus posibilidades, conocer lo que habita allí, era una de las formas de conocimiento que proponía el movimiento surrealista. Tal vez en ese inconsciente que funciona como memoria, como espacio-tiempo, como contenedor de conocimientos y experiencias, se encuentren todas las sapiencias que hemos guardado a través de muchas vidas.

Aprovechamos este espacio para desearles una feliz navidad y un prospero año 2019.

bobiglez@gmail.com