/ viernes 10 de junio de 2022

Humanitas. Arte y pasión

Del White cube al Blockbuster.

Estamos viviendo nuevamente tiempos de desestabilidad en las estructuras de la cultura, los síntomas están presentes, se manifiesta lo contenido y lo desgarrado.

Las rutas de resistencia la imponen los artistas, los creadores culturales y los espacios independientes.

La investigación, documentación y exhibición de las últimas décadas de la historia visual y cultural no ha sido abordada institucionalmente en nuestra región. Solo existen esfuerzos parciales en esta tarea de investigación.

Esta desestabilidad no solo se percibe aquí, está sucediendo en todas las regiones del país, estamos en un estado de transición por el cambio de régimen, que es lento y sintomático, si observamos algunos capítulos de la historia nacional, podremos comprender cómo fueron en otros tiempos los procesos del cambio y sus efectos.

Es importante prestar atención y documentar el estado que guarda la estructura cultural del país en sus tres niveles de gobierno y sus reacciones y animadversiones hacia ciertos actores culturales que son privilegiados o excluidos e ignorados.

Los espacios de exhibición como los museos y foros culturales han mudado sus exposiciones del “White Cube” al “Blockbuster”, es decir, que buscan exhibiciones para llenar los espacios culturales con espectáculos mercadotécnicos, dejando de lado la investigación curatorial, sobre temas actuales, como el desarrollo de las artes y sus transiciones, los abordajes y des-abordajes desde el nacionalismo hasta la globalización. La producción de contenidos educativos en los que se exalten los valores de la cultura glocal, la ética, la democracia, la paz y los derechos humanos que son una emergencia.

Somos espectadores desde la comodidad de nuestros dispositivos electrónicos digitales sin hacer más. Incapaces de crear ambientes de aprendizaje.

El neoliberalismo y el capitalismo salvaje, han dejado sus efectos nocivos en la sociedad de consumo, descuidando la formación de las nuevas generaciones como ciudadanos libres, comprometidos con la comunidad, el medio ambiente, los derechos y valores humanos, capaces de renovar conceptos e innovar soluciones para los problemas y las contingencias sociales y naturales. Om bobiglez@gmail.com

Del White cube al Blockbuster.

Estamos viviendo nuevamente tiempos de desestabilidad en las estructuras de la cultura, los síntomas están presentes, se manifiesta lo contenido y lo desgarrado.

Las rutas de resistencia la imponen los artistas, los creadores culturales y los espacios independientes.

La investigación, documentación y exhibición de las últimas décadas de la historia visual y cultural no ha sido abordada institucionalmente en nuestra región. Solo existen esfuerzos parciales en esta tarea de investigación.

Esta desestabilidad no solo se percibe aquí, está sucediendo en todas las regiones del país, estamos en un estado de transición por el cambio de régimen, que es lento y sintomático, si observamos algunos capítulos de la historia nacional, podremos comprender cómo fueron en otros tiempos los procesos del cambio y sus efectos.

Es importante prestar atención y documentar el estado que guarda la estructura cultural del país en sus tres niveles de gobierno y sus reacciones y animadversiones hacia ciertos actores culturales que son privilegiados o excluidos e ignorados.

Los espacios de exhibición como los museos y foros culturales han mudado sus exposiciones del “White Cube” al “Blockbuster”, es decir, que buscan exhibiciones para llenar los espacios culturales con espectáculos mercadotécnicos, dejando de lado la investigación curatorial, sobre temas actuales, como el desarrollo de las artes y sus transiciones, los abordajes y des-abordajes desde el nacionalismo hasta la globalización. La producción de contenidos educativos en los que se exalten los valores de la cultura glocal, la ética, la democracia, la paz y los derechos humanos que son una emergencia.

Somos espectadores desde la comodidad de nuestros dispositivos electrónicos digitales sin hacer más. Incapaces de crear ambientes de aprendizaje.

El neoliberalismo y el capitalismo salvaje, han dejado sus efectos nocivos en la sociedad de consumo, descuidando la formación de las nuevas generaciones como ciudadanos libres, comprometidos con la comunidad, el medio ambiente, los derechos y valores humanos, capaces de renovar conceptos e innovar soluciones para los problemas y las contingencias sociales y naturales. Om bobiglez@gmail.com