GRABANDO…
La toma de protesta de Rafael Camacho Guzmán como mandatario estatal fue en el antiguo Auditorio Josefa Ortiz de Domínguez que estaba en el mismo lugar, donde está el actual auditorio Corregidora, uno de los orgullos de aquel mandatario. Ahí ya le esperaba el gobernante saliente, el arquitecto Antonio Calzada Urquiza, llega don Rafael y le toma protesta el presidente del Congreso Estatal, acto seguido y ante la sorpresa de todos los presentes, Camacho Guzmán invita a que una comisión acompañe al ya ciudadano Calzada Urquiza a salir del recinto, lo abandonó entre aplausos. Ese era don Rafael, en ocasiones intolerante y a veces grosero y malhablado, brusco y en ocasiones un caballero.
Gobernante hiperactivo, Camacho, entre importantes obras, remodeló en 1981 el actual Palacio de la Corregidora, antiguo domicilio del Corregidor, que durante muchos años del siglo pasado era la cárcel y alcaldía del municipio de Querétaro.
Rescató Lomas de Casa Blanca empedrando, instalando drenaje, antiguamente las aguas negras corrían por pequeños arroyos que se formaban entre la tierra que se estancaba en hoyos de las calles de tierra.
Les construyó, o remodeló, las presidencias municipales de los 18 municipios; actualiza la red carretera de la sierra y de otras partes del estado; rescató del abandono recuperando la belleza las cinco misiones que construyeron los indígenas por iniciativa del fraile franciscano Junípero Serra, entre 1751 y 1776, hoy reconocidas como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Culmina su mandato después de obras y más obras por todos los municipios, cuando por sus contactos en los medios de comunicación y su terquedad en hacer un estadio de futbol, al final de 1982 elije un gran predio en las faldas del cerro del Cimatario. El estado tiene dinero y la Federación lo apoya, también Televisa y la Federación de futbol de México con el beneplácito de la FIFA, la que maneja el deporte del balompié a nivel internacional.
Un día llama a sus funcionarios de los dineros y de obras públicas y ordena construir un estadio de futbol de primer mundo en aquel entonces y todos se ponen a trabajar.
Inicia 1983, el 24 de enero, y después de presentar con pompa y circunstancia el ambicioso proyecto, inicia la construcción del coloso del Cimatario, se escuchan las primeras explosiones para hacer la fosa que albergará la primera sección del magno escenario que se proyecta para una capacidad de casi 50 mil aficionados. Conste que hablamos de 1983, cuando nuestra ciudad tenía casi 216 mil habitantes, pero la visión de un gobernante como Rafael Camacho Guzmán, que siempre pensó en grande, quiso, y lo hizo, un gran estadio que sería en 1986 sede del Mundial de futbol de 1986.
Dentro de ocho días comentaré detalles de la construcción del estadio Corregidora, un escenario, aún en este 2019, digno del espectáculo favorito de los queretanos y de los mexicanos: el futbol.
OFF THE RECORD…
No tengo nada que comentar de política…la vida sigue igual. Gracias, Buenas noches.
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