/ jueves 21 de febrero de 2019

Serrana de Corazón

Sobre las estancias infantiles


De primera mano, he podido ver el apoyo que actualmente brindan las estancias infantiles en Querétaro a padres y madres trabajadoras, por lo que he sido testigo de la injusticia que representa el recorte de casi la mitad del presupuesto asignado para ellas por el Gobierno federal.

En el estado, se cuentan en total 165 estancias, que atienden a siete mil niños en sus primeros años de vida, para que sus padres o en muchos casos papás o mamás solteras puedan tener una vida laboral, mientras que a nivel nacional, el impacto de atención de las estancias infantiles es de casi 400 mil niños y niñas.

En Acción Nacional no nos quedaremos de brazos cruzados, mientras se pretende dejar a estas instituciones educativas en la incertidumbre: hemos anunciado la presentación de amparos colectivos, en los que impugnaremos las Reglas de Operación contenidas en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019 (PEF) por la ausencia total de una motivación que justifique la disminución presupuestal a este programa.

El gobierno de la cuarta transformación, atenta contra el derecho a la educación de estos menores consagrado en la Constitución Mexicana, su seguridad social y no se ha privilegiado el interés superior del menor y su desarrollo pleno, al implementar sus políticas públicas, razones suficientes para solicitar la intervención por la vía jurídica y llegar hasta las últimas consecuencias.

Además, la medida tampoco aporta al derecho laboral de los padres de familia, tomando en consideración que cancelar el programa afecta el ejercicio libre de su profesión, comercio o actividad lícita.

Con relación a las mismas estancias, se afecta su derecho al ejercicio libre de su profesión, comercio o actividad lícita al privarles de los recursos económicos no obstante haber cumplido con los requisitos respectivos, además de que la medida de disminuir la mitad de sus recursos también se convierte en un acto de discriminación, pues se tendrá que elegir tan sólo a unas cuantas estancias para otorgarles recursos, sin que exista un esquema justificado para negarles los mismos recursos a otras, lo cual es un acto arbitrario e inconstitucional a todas luces.

Permítanme darles más datos sobre impacto de un inminente recorte presupuestal a las estancias infantiles en todo el país: actualmente se cuentan casi 400 mil familias afectadas con el recorte de casi el 50 % de los recursos (en 2018 se le asignaron cuatro mil 70 millones de pesos y para 2019 se pretende que sólo sean dos mil 41 millones).

En México hay registradas más de nueve mil estancias infantiles que dan 55 mil empleos directos a cocineras, pedagogas, especialistas, enfermeros, personas de limpieza y asistentes entre otras y el 96 % de estos empleos son mujeres.

Del total de niños y niñas entre 0 y 6 años de edad que no son cuidados por sus padres o madres, el 51.2 % es cuidado por las abuelas, mientras que el 11.3 % asiste a estancias infantiles y sólo el 4.3 % asiste a guarderías privadas, mientras que el 33.3 % se encuentra bajo el cuidado de otras personas.

El Coneval en el análisis del programa durante el ciclo 2017-2018: 93 % de las beneficiarias sentencia que gracias a él pueden trabajar y aumentar los ingresos de su hogar; 72 % asegura que encontró empleo gracias a que ingresaron al programa. Y el dato más alarmante de todos: 34 % de las madres piensa que si el programa desaparece, tendrían que dejar su empleo.

Estos no son datos menores, por el contrario. Así como lo advierten las organizaciones, el recorte presupuestal es un riesgoso paso atrás en la lucha por la equidad, por la igualdad de oportunidades para las mujeres de los casi mil 300 municipios a los que tiene alcance el programa reconocido por la ONU. Programa que, de hecho, en 2014, fue elegido por la organización como uno de los 10, de un total de 80, para implementar un modelo de detección e intervención temprana de casos de discapacidad. Aquí estamos y continuaremos abanderando esta causa.

@sonrocha

Sobre las estancias infantiles


De primera mano, he podido ver el apoyo que actualmente brindan las estancias infantiles en Querétaro a padres y madres trabajadoras, por lo que he sido testigo de la injusticia que representa el recorte de casi la mitad del presupuesto asignado para ellas por el Gobierno federal.

En el estado, se cuentan en total 165 estancias, que atienden a siete mil niños en sus primeros años de vida, para que sus padres o en muchos casos papás o mamás solteras puedan tener una vida laboral, mientras que a nivel nacional, el impacto de atención de las estancias infantiles es de casi 400 mil niños y niñas.

En Acción Nacional no nos quedaremos de brazos cruzados, mientras se pretende dejar a estas instituciones educativas en la incertidumbre: hemos anunciado la presentación de amparos colectivos, en los que impugnaremos las Reglas de Operación contenidas en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019 (PEF) por la ausencia total de una motivación que justifique la disminución presupuestal a este programa.

El gobierno de la cuarta transformación, atenta contra el derecho a la educación de estos menores consagrado en la Constitución Mexicana, su seguridad social y no se ha privilegiado el interés superior del menor y su desarrollo pleno, al implementar sus políticas públicas, razones suficientes para solicitar la intervención por la vía jurídica y llegar hasta las últimas consecuencias.

Además, la medida tampoco aporta al derecho laboral de los padres de familia, tomando en consideración que cancelar el programa afecta el ejercicio libre de su profesión, comercio o actividad lícita.

Con relación a las mismas estancias, se afecta su derecho al ejercicio libre de su profesión, comercio o actividad lícita al privarles de los recursos económicos no obstante haber cumplido con los requisitos respectivos, además de que la medida de disminuir la mitad de sus recursos también se convierte en un acto de discriminación, pues se tendrá que elegir tan sólo a unas cuantas estancias para otorgarles recursos, sin que exista un esquema justificado para negarles los mismos recursos a otras, lo cual es un acto arbitrario e inconstitucional a todas luces.

Permítanme darles más datos sobre impacto de un inminente recorte presupuestal a las estancias infantiles en todo el país: actualmente se cuentan casi 400 mil familias afectadas con el recorte de casi el 50 % de los recursos (en 2018 se le asignaron cuatro mil 70 millones de pesos y para 2019 se pretende que sólo sean dos mil 41 millones).

En México hay registradas más de nueve mil estancias infantiles que dan 55 mil empleos directos a cocineras, pedagogas, especialistas, enfermeros, personas de limpieza y asistentes entre otras y el 96 % de estos empleos son mujeres.

Del total de niños y niñas entre 0 y 6 años de edad que no son cuidados por sus padres o madres, el 51.2 % es cuidado por las abuelas, mientras que el 11.3 % asiste a estancias infantiles y sólo el 4.3 % asiste a guarderías privadas, mientras que el 33.3 % se encuentra bajo el cuidado de otras personas.

El Coneval en el análisis del programa durante el ciclo 2017-2018: 93 % de las beneficiarias sentencia que gracias a él pueden trabajar y aumentar los ingresos de su hogar; 72 % asegura que encontró empleo gracias a que ingresaron al programa. Y el dato más alarmante de todos: 34 % de las madres piensa que si el programa desaparece, tendrían que dejar su empleo.

Estos no son datos menores, por el contrario. Así como lo advierten las organizaciones, el recorte presupuestal es un riesgoso paso atrás en la lucha por la equidad, por la igualdad de oportunidades para las mujeres de los casi mil 300 municipios a los que tiene alcance el programa reconocido por la ONU. Programa que, de hecho, en 2014, fue elegido por la organización como uno de los 10, de un total de 80, para implementar un modelo de detección e intervención temprana de casos de discapacidad. Aquí estamos y continuaremos abanderando esta causa.

@sonrocha

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