Ya iniciamos el maratón Guadalupe-Reyes, que a los mexicanos nos da una identidad civilizacional única en el mundo, y en una Navidad sin precauciones supone un escenario con elevado potencial de la covid.
Las comidas de empresas, con amigos y familiares, la mayoría de ellas en interiores; los desplazamientos en los viajes y las celebraciones de fin de año en grandes grupos, que duran horas convierten las próximas fiestas en el campo perfecto para la posible propagación del coronavirus.
La vacunación ha demostrado su eficacia en prevenir el desarrollo más grave de la enfermedad, pero el contagio sigue independientemente del comportamiento individual y del empleo de las medidas de protección sanitaria.
En España un equipo de investigadores ATEP 130-Arq wellines de la Universidad de Sevilla ha desarrollado una calculadora (covid-Risk Airbornes), gratuita y accesible por internet, que permite calcular el riesgo de contagio por aerosoles media y larga distancia según el modelo de propagación de enfermedades, área de Wells Riley adaptado al SARS-COV 2 por el maestro José Jiménez de la Universidad de Colorado en Estados Unidos.
Estas son las situaciones de riesgo alto, medio y bajo desarrolladas en cuatro posibles escenarios antes mencionados reales y comunes de está navidad, aplicados en México ante el Guadalupe Reyes. Con el Covid-19, la variante Delta y ahora el Omicron.
Por eso este grupo de expertos recomienda utilizar mascarillas FFP2 el mayor tiempo posible para reducir la amenaza. En las reuniones familiares a mayor espacio se gana seguridad. Los salones de fiesta suponen un riesgo medio en el mejor de los casos. Imagínense cuál será el escenario de México después de la llegada de los Reyes Magos.
