/ jueves 4 de marzo de 2021

Sopa de letras | Laguna Verde

Mientras Francia genera el 78% de su electricidad a través de 59 plantas nucleares de generación de energía eléctrica en México, la Central Nucleoeléctrica Laguna Verde podría generar nuestro Chernobyl nacional, pues solo genera el 2% de la energía en nuestro país.

Dicha central se encuentra enclavada en el municipio de Alto Lucero en el estado de Veracruz desde el año 1990 y tiene una capacidad de generación de 1640 megawatts, en la cual no se tiene idea de cómo se está manejando y no sabemos las consecuencias que pudiera tener un accidente nuclear en dicho lugar, que no es cosa menor.

La planta fue proyectada para una vida útil de 40 años más en julio de 2020 la SENER renovó el permiso de operación.

El apagón reciente en varias entidades del país y ante la falta dé explicaciones convincentes puede ser el primero de muchos que vendrán en el futuro cercano, ante la propia escasez de energía eléctrica, la falta de inversión extra, y, o nacional en el sector además de crear políticas que van encontra de las fuentes alternas de energía como la solar y eólica.

Basta analizar el reporte del día 3 de septiembre del 2020 a las 17:00 horas, en que se advierte que la central estuvo en alerta naranja, durante un proceso normal que se debe realizar con 18 meses de recambio de uranio empleado en combustible nuclear, que pudo haber implicado el derretimiento de las paredes del reactor y afectar de manera similar a Chernobyl, una amplia zona del estado de Veracruz durante 200 a 300 años, ya que dicha central se encuentra a solo 60 Kilómetros de Xalapa, y a 70 del Puerto veracruzano, y tiene varios millones de gu en esta zona.

Lo único que se sabe ante la opacidad de la empresa que siempre la ha manejado, CFE es que cometió ciertos errores de proceso que se manejan bajo estándares internacionales de la Organización Internacional de energía, donde algunos de los sistemas de seguridad estaban deshabilitados en el momento de recambio de uranio, lo cual provocó que durante 13 horas, la central estuviera en peligro de una explosión, similar a Chernóbil. Se rumora que hubo otros dos incidentes, entre octubre y noviembre de 2020.

Mientras Francia genera el 78% de su electricidad a través de 59 plantas nucleares de generación de energía eléctrica en México, la Central Nucleoeléctrica Laguna Verde podría generar nuestro Chernobyl nacional, pues solo genera el 2% de la energía en nuestro país.

Dicha central se encuentra enclavada en el municipio de Alto Lucero en el estado de Veracruz desde el año 1990 y tiene una capacidad de generación de 1640 megawatts, en la cual no se tiene idea de cómo se está manejando y no sabemos las consecuencias que pudiera tener un accidente nuclear en dicho lugar, que no es cosa menor.

La planta fue proyectada para una vida útil de 40 años más en julio de 2020 la SENER renovó el permiso de operación.

El apagón reciente en varias entidades del país y ante la falta dé explicaciones convincentes puede ser el primero de muchos que vendrán en el futuro cercano, ante la propia escasez de energía eléctrica, la falta de inversión extra, y, o nacional en el sector además de crear políticas que van encontra de las fuentes alternas de energía como la solar y eólica.

Basta analizar el reporte del día 3 de septiembre del 2020 a las 17:00 horas, en que se advierte que la central estuvo en alerta naranja, durante un proceso normal que se debe realizar con 18 meses de recambio de uranio empleado en combustible nuclear, que pudo haber implicado el derretimiento de las paredes del reactor y afectar de manera similar a Chernobyl, una amplia zona del estado de Veracruz durante 200 a 300 años, ya que dicha central se encuentra a solo 60 Kilómetros de Xalapa, y a 70 del Puerto veracruzano, y tiene varios millones de gu en esta zona.

Lo único que se sabe ante la opacidad de la empresa que siempre la ha manejado, CFE es que cometió ciertos errores de proceso que se manejan bajo estándares internacionales de la Organización Internacional de energía, donde algunos de los sistemas de seguridad estaban deshabilitados en el momento de recambio de uranio, lo cual provocó que durante 13 horas, la central estuviera en peligro de una explosión, similar a Chernóbil. Se rumora que hubo otros dos incidentes, entre octubre y noviembre de 2020.