La apertura y autorización de nuevas ofertas de comunicación para regiones del estado, como la que recién se entregó para Peñamiller representa una importante aportación en beneficio de la gente del medio rural.
La limitada oferta radiofónica para las zonas rurales del estado, han limitado en gran parte el intercambio y la apertura de mejores opciones o alternativas de comunicación, sobre todo de interés social.
Para beneficio de una amplia zona rural de San Joaquín, Tolimán y Peñamiller, se autoriza una concesión de radio comunitaria, concesión que seguramente será una excelente oportunidad para enriquecer la comunicación y cultura tradicional de las regiones mencionadas.
Con el nacimiento de Radio-Miller, bajo la autorización de una concesión de radio comunitaria, se abre una nueva oferta de intercambio y comunicación al servicio de la gente y sus comunidades.
Sin lugar a dudas, ante la escasa o casi nula oferta de radiodifusoras no comerciales, Radio-Miller se convierte en una nueva opción comunicacional al servicio de las localidades aisladas y “dejas a la mano de Dios”.
Con excepción de Radio Querétaro (RTQ y Radio Universidad Autónoma de Querétaro, UAQ, el territorio queretano carece de opciones culturales de interés general, de ahí que con la llegada de la nueva estación radiofónica comunitaria con sede en Peñamiller, se abra el abanico de alternativas de comunicación, sobre todo para la zona del semidesierto y parte de la zona alta de la región serrana.
Bajo la premisa de ofrecer una programación bilingüe otomíe español para el público de la zona de Tolimán y una amplia oferta de programas de rescate cultural y de tradiciones Radio-Miller se presenta como una magnífica posibilidad de comunicación de y para la comunidad.
Bajo este esquema, lejos de la programación comercial intrascendente, las estaciones culturales como RTQ, Radio UAQ y ahora Radio-Miller fortalecen el mercado radiofónico que aporta sin enajenar. Felicidades.
