/ jueves 25 de enero de 2018

Tierra Adentro - “No todo lo que brilla es oro”

Al cabo de la etapa final de registros de aspirantes a algún cargo de elección popular, los partidos tienen poco tiempo para la “operación cicatriz”, luego del desencanto, dolor, indignación y enojo de varios, sino es que de muchos suspirantes rebasados por las circunstancia, cerrazón e imposición partidaria.

Como es sabido, cada tres años, como sucede en todo el estado y el país, en los partidos políticos siempre hay militantes y/o aspirantes que se quedan con las ganas de haber sido elegidos o nombrados a algún cargo de elección popular o partidario, situación que esta vez se ha visto en toda la región serrana. Pero que no por ello se detendrá el proceso de “cicatrización” a fin de lograr acuerdos que reagrupen sus fuerzas.

Caso especial está registrándose en el semidesierto queretano, más preciso en Peñamiller donde gran parte de la estructura municipal tricolor no soportó el “encontronazo de intereses”, con la nominación del eterno aspirante, hoy ya candidato Agnolí García Rosales a la presidencia municipal.

Se sabe que al menos el 80% de la estructura partidaria del Comité Directivo Municipal, encabezados por el dirigente local en turno, el ex Edil, Manuel García Leal se ha inconformado, incluso salido del tricolor. Bueno eso dijeron en caliente cuando se supo la designación oficial.

También en Pinal de Amoles se cuecen habas, dice el refrán popular y es que se registra  una fuerte confrontación de grupos, pero que en este caso, con todo respeto a ellos, “ni sombra le van hacer al ya candidato Isidro Garay Pacheco, quien  con ellos o sin ellos “ya anda  rumbo a la presidencia pinalense.

Por lo demás, en Arroyo Seco, Jalpan de Serra y Landa de Matamoros, con excepción del mal querido y muy cuestionado ex edil, Elfego Torres Balderas, por cierto ya con el quemón de haber sido inhabilitado por la Contraloría, ya saben por qué, se aferra a meterle el  pie a la ya candidata Cony Iliana Montes Ríos a la presidencia arroyosequense.

Así las cosas para los priistas serranos, sin dejar de mencionar la discordia que generó la nominación de la ya candidata a la diputación por el XV distrito local electoral, donde como se sabe había al menos cuatro “tiradores”, varones que por “cosas de la vida”, y que por cierto nunca se consideró así, la nominación queda en una mujer, Carina Careaga Pineda. Se dice que por recomendación, sugerencia o arreglo de última hora de Jesús Rodríguez Hernández.

En fin, es tiempo de curación, pomada y analgésicos si es que el tricolor quiere hacerle cosquillas a los bien empoderados panistas o a los aspirantes emergentes de otros partidos políticos para la elección del primero de julio.

Al cabo de la etapa final de registros de aspirantes a algún cargo de elección popular, los partidos tienen poco tiempo para la “operación cicatriz”, luego del desencanto, dolor, indignación y enojo de varios, sino es que de muchos suspirantes rebasados por las circunstancia, cerrazón e imposición partidaria.

Como es sabido, cada tres años, como sucede en todo el estado y el país, en los partidos políticos siempre hay militantes y/o aspirantes que se quedan con las ganas de haber sido elegidos o nombrados a algún cargo de elección popular o partidario, situación que esta vez se ha visto en toda la región serrana. Pero que no por ello se detendrá el proceso de “cicatrización” a fin de lograr acuerdos que reagrupen sus fuerzas.

Caso especial está registrándose en el semidesierto queretano, más preciso en Peñamiller donde gran parte de la estructura municipal tricolor no soportó el “encontronazo de intereses”, con la nominación del eterno aspirante, hoy ya candidato Agnolí García Rosales a la presidencia municipal.

Se sabe que al menos el 80% de la estructura partidaria del Comité Directivo Municipal, encabezados por el dirigente local en turno, el ex Edil, Manuel García Leal se ha inconformado, incluso salido del tricolor. Bueno eso dijeron en caliente cuando se supo la designación oficial.

También en Pinal de Amoles se cuecen habas, dice el refrán popular y es que se registra  una fuerte confrontación de grupos, pero que en este caso, con todo respeto a ellos, “ni sombra le van hacer al ya candidato Isidro Garay Pacheco, quien  con ellos o sin ellos “ya anda  rumbo a la presidencia pinalense.

Por lo demás, en Arroyo Seco, Jalpan de Serra y Landa de Matamoros, con excepción del mal querido y muy cuestionado ex edil, Elfego Torres Balderas, por cierto ya con el quemón de haber sido inhabilitado por la Contraloría, ya saben por qué, se aferra a meterle el  pie a la ya candidata Cony Iliana Montes Ríos a la presidencia arroyosequense.

Así las cosas para los priistas serranos, sin dejar de mencionar la discordia que generó la nominación de la ya candidata a la diputación por el XV distrito local electoral, donde como se sabe había al menos cuatro “tiradores”, varones que por “cosas de la vida”, y que por cierto nunca se consideró así, la nominación queda en una mujer, Carina Careaga Pineda. Se dice que por recomendación, sugerencia o arreglo de última hora de Jesús Rodríguez Hernández.

En fin, es tiempo de curación, pomada y analgésicos si es que el tricolor quiere hacerle cosquillas a los bien empoderados panistas o a los aspirantes emergentes de otros partidos políticos para la elección del primero de julio.