Ya casi llega el día más emocionante del año, tanto para los niños como para sus papás el día de Reyes es un acontecimiento que se queda grabado en la memoria por siempre. Su historia aparece dentro de la Biblia, pero eruditos en el tema han desmenuzado los acontecimientos para poder conocer un poco más acerca de estos magos provenientes del Oriente y que fueron a darle regalos al niño Jesús.
En está breve reseña trataremos de explicar un poco su origen, que puede ser leído en la víspera de su llegada a los niños, que puedo asegurar que el relato los hará viajar en su imaginación la cual no se debe perder y para los padres será un momento muy especial para convivir todos en familia.
HISTORIA DE LOS REYES MAGOS
La fiesta es conocida como “La Epifanía del Señor”, su significado en griego es “manifestación”. Esto se refiere a que Dios se revela y se da a conocer. En algunas partes del mundo se celebra el 6 de enero.
Cuando decimos que son "magos" es porque en la antigüedad esta palabra era relacionada con los “sabios”, según los relatos estos hombres pudieron llegar de lugares lejanos como Arabia, Mesopotamia o algún lugar más al este de Palestina.
Sin precisar si realmente eran tres los hombres que acudían a visitar al niño, si se cree que al seguir la estrella que los guiaría a su destino eran astrólogos, y los elementos que llevaban para obsequiar tenían un significado.
EL ORO
Este elemento está relacionado con la realeza.
EL INCIENSO
Se relaciona con la divinidad.
LA MIRRA
La mirra es una resina aromática que exuda la Commiphora myrrha, un árbol que de forma natural crece al noreste de África, en Arabia y Turquía. Se empleaba para elaborar perfumes y ungüentos con los que se untaban las vendas para embalsamar a los muertos. Por ello este elemento está ligado a la humanidad.
Fue a partir del siglo VIII, cuando los Reyes Magos recibieron nombres, estos con algunas variaciones. Primeramente se llamaron Bithisarea, Melchior y Gathaspa, durante la Edad Media fueron incluso venerados como santos.
Hoy los conocemos como Melchor, Gaspar y Baltasar, nombres que aparecieron por primera vez durante el siglo VI en el mosaico de San Apollinaire Nuovo (Rávena).
Melchor, se representa generalmente como un anciano blanco y con barba, a similitud de las personas provenientes de la zona europea. Él ofrece al niño el oro por la realeza de Cristo.
Gaspar, representa a la zona asiática y porta el incienso en alusión a la divinidad de Jesús.
Baltasar, es negro en representación de África y regala al Salvador la mirra, sustancia que se utilizaba para embalsamar cadáveres y a su vez se consideraba símbolo de la humanidad del Señor.