Pensar, escribir y producir. Son tres cosas que Lucy Magaña hizo durante 48 meses mientras esperaba la llegada de su primera hija. “Siempre me había dado miedo pensar en que si me convertía en madre dejaría de hacerlo”, dice la artista e investigadora queretana, quien dentro de unos días mostrará que es posible ser madre y artista en la contemporaneidad, y lo que implica serlo.
Lucy recibió una llamada hace unos meses donde le notificaban que había sido avalado su proceso como madre adoptiva: “ Recibirás tu carta de `mamá idónea´ y una bebé de dos meses”, recuerda que escuchó al otro lado del teléfono y ella solo rompió en llanto.
Acostumbrada a pintar lo que sucede en su cotidianidad, el tema de la maternidad ocupó pronto el centro de su creación, antes y aún ahora. Sin embargo, al igual que en los feminismos, Lucy Magaña aclara que hay más de una manera de ejercer la maternidad: existe la madre trabajadora, la ausente, la no madre (tías, monjas, maestras de escuela), así como la maternidad queer y otras que tampoco se nombran como la suya, la maternidad por adopción.
Poco es lo que se ha escrito sobre ello en pleno siglo XXI, y aún menos lo que se ha hecho desde el arte contemporáneo, lamenta. Por esta razón, es que ha dedicado los últimos cuatro años al tema, mismo tiempo que duró su proceso legal para conseguir la adopción de su primera hija.
En ese camino, la artista también indagó sobre las diferentes maneras en que se ha representado la maternidad en la historia del arte, y los estereotipos que han resultado de ello.
“En el arte moderno, lo que más se acerca al estereotipo de la virgen, de la santidad y la castidad, es el de la madre: la madre de Dios, la madre del niño, la madre de Jesús… entonces a la mujer se le santifica por el simple hecho de serlo, cuando seguimos siendo las mismas de antes; seguimos cometiendo los mismo errores, seguimos sintiendo, teniendo orgasmos, cogiendo… y esa parte no se nombra”.
Para hacer frente a este arquetipo y otros, como el de la “madre abnegada”, la artista realizó un diagnóstico en redes sociales, en el que preguntó a madres de todas las edades y ocupaciones, lo que más disfrutaban y odiaban de serlo.
Las respuestas de ellas, junto con su propia experiencia e investigación estética, podrán verse en Caminos a las maternidades, una colección en la que Lucy Magaña analiza lo que significa ser madre tocando aspectos biológicos y emocionales. También muestra lo que implica serlo en el ámbito laboral y más específicamente en la producción artística.
“Yo quiero hablar de esa maternidad de la que no se habla, y quiero hacerlo desde la forma en que sé hacerlo que es el arte; además, quiero abordarla desde un no ideal y desde el feminismo”, agrega.
Su colección se integra de dibujo, pintura, fotografía, arte instalación y performance, y se inaugurará en el Museo de Arte Contemporáneo Querétaro el próximo 8 de marzo, a las 19:00 horas, a propósito del Día Internacional de la Mujer.
Otras inauguraciones por el 8M
A la par de su propuesta, se presentará ese mismo día Manifiestas, evidencias y testimonixs de Maris Bustamante, Mónica Mayer, Lorena Wolffer y Naomi Uman, en la que las artistas ponen el reflector sobre la violencia experimentada por las mujeres en diferentes ámbitos de la vida.
Con piezas como El Tendedero (1978), de Mónica Mayer, se invitará a reflexionar sobre los abusos de los que han sido víctimas las mujeres desde los setentas hasta la actualidad. De hecho, para la nueva edición de esta pieza, la reconocida artista feminista lanzó un formulario en redes sociales para reunir las experiencias de mujeres en Querétaro, con la intención de hacerlas partícipes de esta instalación.
Como parte de la misma exposición, la pieza Evidencias de Lorena Wolffer muestra objetos que han servido como instrumentos de tortura de hombres hacia mujeres. Además, incluye una pieza inédita de la artista Maris Bustamante así como tres mediometrajes de la artista estadounidense Naomi Uman. Estas obras forman parte también de la colección del Museo Universitario de Arte Contemporáneo (MUAC) y son piezas ya reconocidas que invitan a reflexionar alrededor de la evolución y vigencia de la violencia contra las mujeres.
También se inaugurará Las olas de mi cuerpo hablan cetáceo, de Bala Rodríguez. La propuesta se conforma de performance, fotos y videos, y centra la reflexión en torno al cuerpo gordo, lésbico y racializado.
Las obras permanecerán vigentes hasta el 29 de mayo, y podrán visitarse de martes a domingo, de 12:00 a 20:00 horas. La entrada es completamente gratuita.
¿Quién es Lucy Magaña?
Lucy Magaña es artista feminista, doctora en Artes por la Universidad de Guanajuato, y postdoctorante en la Universitat de Barcelona. Tiene una maestría en Artes Visuales con terminación en pintura por la Academia de San Carlos de la UNAM, y es licenciada en Artes Visuales por la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ). Actualmente es catedrática de arte y performance en la Facultad de Bellas Artes de la UAQ y directora del Centro de Arte Bernardo Quintana Arrioja.
Con exposiciones individuales y colectivas nacionales e internacionales, ha recibido varios premios y reconocimientos de pintura en México y ha sido publicada en diferentes libros y revistas especializadas en cuestiones artísticas y feministas en el país y el extranjero. Ha sido becaria del PECDA - Jóvenes creadores en el 2005. Su obra se encuentra en colecciones dentro y fuera del país.