El matador se llevó dos orejas en el lienzo charro Juan Flores

Es la segunda corrida del año que brinda el empresario Martín Becerra en San Luis de La Paz

Marcos Arellano | Diario de Querétaro

  · lunes 11 de octubre de 2021

Foto: Marcos Arellano | Diario de Querétaro

Una gran tarde de toros amenizada con mariachi, fue la que se dio en el Lienzo Charro Juan Flores de San Luis de la Paz, con los matadores José María Pastor y José Mari Macías, este último el gran triunfador tras cortas dos orejas en el segundo festejo en lo que va del año en este coso.

El empresario Martín Becerra sigue apostando por la fiesta brava y en esta ocasión se vistió de manteles largos al dar un reconocimiento al empresario Juan José Torres Landa García, por su gran labor en el mundo taurino y la responsabilidad social que ha tenido en Querétaro.

Un mano a mano interesante con dos jóvenes matadores, lidiaron seis toros de la Ganadería de Joaquín Aguilar, los toreros no se guardaron nada y se entregaron al público de San Luis de la Paz.

JOSÉ MARÍA PASTOR

Joven torero en una ventana que le daba la oportunidad de mostrarse, en su primero de nombre “diluvio”, bien presentado, causó un percance al derribar al picador que tras varios segundos de angustia lograron ponerlo de pie y no pasó a mayores.

Cuatro pinchazos en su primero evitaron coronar su faena con premio, a pesar de que fue lúcido no pudo matar y eso provocó silencio en las tribunas.

Foto: Yolanda Longino | Diario de Querétaro

Pastor con el segundo de su lote creció en confianza, un toro que no respondió a los llamados, tuvo que batallar para recibir embestidas y otro pinchazo evitó nuevamente el premio.

Segundo toro

Siempre adelante

JOSÉ MARÍA MACÍAS

De rodillas recibió al astado de nombre “agradecimiento” un ejemplar muy bien presentado, el audaz matador supo llevarlo y le sacó el mayor provecho posible.

Macías lúcido con el capote, una zapopina de rodillas que hizo prender al graderío, después dos zapopinas más de pie llevadas a cabo a la perfección, en la estocada se quedó a tres cuartos, eso le valió una oreja aunque el público quería las dos para Macías.

En su segundo siguió con temple y precisión, logró llevarlo con pases naturales, no pudo matar y se tuvo que conformar con la ovación.

Para el tercero tuvo que esforzarse de más para sacarle jugo a un toro muy distraído, Macías realizó el péndulo en repetidas ocasiones haciendo vibrar a los espectadores, a la hora de matar, la espada entró de lado y eso le castigó mucho su faena por lo que solo recibió una oreja. Un total de 2 para levarse el triunfo.