El último gran ídolo de la lucha libre, el Hijo del Santo, regresó a Querétaro este sábado por la noche e hizo emocionar a sus seguidores, quienes lo recibieron calurosamente e hicieron retumbar la Arena Querétaro con el grito de ¡Santo! ¡Santo!.
La lucha estelar de esta función de Lucha libre profesional, fue protagonizada por Ciclón Ramírez Junior y el enmascarado de plata, El Hijo del Santo, a quien los aficionados recibieron de gran forma ovacionandolo desde el principio, a este ídolo de los encordados.
Sus rivales fueron en esta ocasión Hijo de Fishman y Rey Espectro, dos rudísimos que trataron de hacer uso de sus marrullerias para salir con el brazo en alto, pero los técnicos se impusieron en la primera caída con toque de espaldas sobre Fishman Junior y el Hijo del Santo con tope y la de a caballo sobre Rey Espectro.
En la segunda caída, los rudos parecían dominar las acciones, para ahora sí quedarse con el triunfo, sin embargo, las cosas no salieron como lo esperaban, primero Fishman trato de despojar de la incógnita al heredero de plata e incluso estuvo a punto de llevársela victoria con un fault sobre el técnico.
El referee estaba distraído con revisar a Ciclón Ramírez Junior, que había caído descompuesto afuera del encordado, lo que aprovechó el Hijo del Santo para pagarle a Fishman con la misma moneda, pero ahora sí el referee contó los tres segundos, decretando el triunfo de los científicos en dos caídas al hilo.
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En la lucha semiestelar, Mohicano I y Mohicano Junior se impusieron en tres emocionantes caídas a Canek Junior y Lizmark Junior, que salieron en plan muy rudo, pero no pudieron conseguir el triunfo en esta función, que dejó un buen sabor de boca en los aficionados queretanos.