Nicolás Valdés Paleta irrumpe en el mundo musical con una propuesta en la que mezcla lo mejor de dos mundos, pues luego de haber vivido en Canadá por varios años hasta terminar su carrera de cine, llegó a México para reencontrarse con este país en el que compartirá su sentir a través de hip hop y rap con flow, donde prima la lírica.
“Desde chico la música ha sido parte de mi vida y también estudié cine que siempre me ha causada mucha pasión; el chiste de este proyecto es juntar estos dos mundos con la música, con lo que va a ser el equivalente a audiovisual, dirigiendo mis propios videos y conceptualizando”, dice el joven de 21 años.
Sin embargo, su incursión musical no es una casualidad, pues confiesa que desde que estudiaba cine experimentó con una banda de rock, además de escribir algunos temas porque ha encontrado en este espacio la oportunidad de expresarse. “Muchas de las canciones son historias mías y cosas que he vivido, ya sea de momentos felices o quizá de alguna ruptura, pero también son historias que veo en el mundo a través de amigos y familia, quienes viven experiencias que yo intento proyectar; la inspiración llega de lo que veo y percibo del mundo”.
Asimismo, reconoce que reencontrarse con temas escritos por él, en retrospectiva lo ayudan a entenderse a sí mismo en el presente, ya que está consciente de que gracias a todas aquellas huellas es que se ha conformado tal y como es, además de poder ver su propia evolución.
Con respecto a lo que podrá descubrirse a través de letras como “Tranzë”, el primer sencillo que ha elegido para destapar su proyecto, dice que la gente se encontrará con una contradicción, pues a pesar de ser alguien introspectivo y callado, puede ser sociable y expresarse; “es como una contradicción de cosas, pero tengo varios lados y con cada canción me gusta explorar cada una de estas facetas”.
Con una actitud humilde dice que lo mejor de la música, como en otros artes como la actuación y el cine, es que puede ir evolucionando, por lo cual, en un futuro se visualiza creciendo y aprendiendo para conectar con grandes audiencias; “es lo que más ilusión me causa”.
Con grandes ejemplos
Siendo hijo de los actores Plutarco Haza y Ludwika Paleta comparte que si bien no ha sido el centro de atención de los reporteros y fotógrafos, ha vivido frente a los reflectores, lo que planea utilizar para dar a conocer su propuesta; “admiro a mis papás y lo que hacen, pero ahora que puedo proyectar mi visión y empezar mi carrera, me gusta la idea de transmitir algo con la música, que es lo primero que busco”.
Sobre los consejos que ha recibido de ellos, comparte que lo impulsan a mostrarse tal como es, primando la autenticidad, además de siempre mantenerse aterrizado. “Me dicen que tenga la vista al cielo, pero con los pies al suelo y centrado. Para mí son una gran crítica porque siempre me hablan con la verdad, y me apoyan porque saben que esto es lo que me hace feliz”.
En la silla de director
Aunque planea conformar los videos de sus propias creaciones musicales partiendo de un concepto, dice que además tiene otros trabajos, específicamente en post producción. “El primer video que va a salir es animado, y yo estuve en la parte del concepto, pero la intención es hacer algo nuevo con cada canción, dependiendo de lo que el tema proyecte y quiera transmitir, y así crear algo que lo complemente”.
Sin embargo, no descarta en un futuro verse inmerso en el séptimo arte. “Claro que me encantaría dirigir y hacer mis guiones, pero el rollo de director sí es algo en lo que te tienes que formar primero”, reconoce.
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