Con un auditorio visiblemente lleno, las aves migratorias, Joaquín Sabina y Joan Manuel Serrat, arrancaron con su concierto en el Auditorio Josefa Ortiz de Domínguez, poco después de las 20:30 horas.

Los afamados heraldos de la trova comenzaron su recorrido musical cantando “Esta noche contigo”, “No hago otra cosa que pensar en ti” y “Aves de paso”, acompañados por las voces de alrededor de 4 mil 800 espectadores de todas las edades, como muestra de la vigencia de su música y poesía.

Entre bromas y anécdotas en las que hablaron del amor y de las historias detrás de sus canciones, así como de la contaminación y la migración en el Mediterráneo, entonaron juntos y por separado temas entrañables como “Por el bulevar de los sueños rotos”, “19 días y 500 noches”, “Y sin embargo”, “Hoy puede ser un gran día”, "Y nos dieron las diez", “ Tu nombre me sabe a hierba” y “ Caminante no hay camino”.

Con “La del pirata cojo” ambos salieron ataviados como navegantes filibusteros, y después de argumentar su cansancio debido a la manera “en que nos entregamos en el escenario”, chocaron dos copas por los queretanos.

Luego de visitar Ciudad de México, Nuevo León y Jalisco, los cantautores cerraron en Querétaro con su gira” No hay dos sin tres” por el país.

Se trata de la tercera vez que los cantautores unen sus voces sobre el escenario. En 2007 realizaron su primera gira “Dos pájaros de un tiro”, y en 2012 retomaron la ruta con “Dos pájaros contraatacan”; y como “No hay dos sin tres”, decidieron retornar una vez más para cantar a dueto sus temas, así como nuevas versiones de sus clásicos.