El recorrido que por Querétaro se realiza con las reliquias deSan Vicente de Paul reabre la preocupación de velar por quienessufren carencias y por tanto, de finalmente abrir las nuevasinstalaciones del Banco de Alimentos, que permitiría atendercuatro veces más la cantidad de beneficiarios, analizó enentrevista el obispo de Querétaro, Faustino ArmendárizJiménez.
“Es un camino de sensibilización para la sociedad, de nocerrar los ojos y cruzar los brazos, la mayoría de nuestro puebloes un pueblo pobre, es un pueblo que necesita de manos extendidas alos lugares donde se vive esta pobreza”.
Dijo que son muchos los espacios desde se puede trabajar paraerradicar la pobreza o al menos, atender a los hermanos e inclusofamilias, que viven en la vulnerabilidad de la pobreza.
Lamentó que en los comedores parroquiales son cada vez más losque asisten para recibir ayuda, pero enfatizó que son variascomunidades muy pobres, que requieren de políticas públicas queayuden a contrarrestar.
“Yo recuerdo que existe una campaña contra el hambre, yo creoque habría que darle prioridad a esta, a nivel nacional y sedieron muchos recursos para esto… y por otro lado, nuestraiglesia propone abrir el nuevo edificio del Banco de Alimentos, queno hemos podido abrir”.
Razonó que la imposibilidad de operar el Banco, que se ubica enUniverso 2000, ha sido por situaciones protocolarias, pero confióque será posible ponerlo en operación, en beneficio de quienesrequieren ayuda.
Por último, expresó que son muchas las personas que quierensumarse con apoyos, pero desconocen los canales para hacerlosllegar.
“Si te donan un tráiler de tomate ¿dónde lo pones?Necesitas un espacio amplio, necesitas un espacio para… por unlado darle salida pronto, por otro lado, para conservarlo un tiempomínimo mientras se distribuye”.
Por último, sostuvo que la Diócesis de Querétaro se encuentraen oración para lograr que el edificio del Banco de Alimentospueda iniciar operaciones, en beneficio directo de las familiasnecesitadas.
