/ miércoles 2 de agosto de 2017

Canto y alegría para los niños de Tolimán

Movimiento,expresión e identidad comunitaria para sus 40integrantes Tolimán, Qro.- En la casa decultura de Tolimán, cerca de 40 niños corren de lado a lado,brincan, se divierten y se alistan para su clase de canto. Losviernes y sábados se han convertido en su días favoritos, ya quese reúnen para interpretar canciones del dominio popular mexicanoy algunos clásicos infantiles de Cri-Crí, como parte delrepertorio que aprenden en el coro “Thuju Ne Njohya” (canto yalegría).

“Thuju Ne Njohya” (canto y alegría) es el coro comunitarioque surgió en agosto del año pasado fundamentado como un espaciodonde los integrantes construyen un autoconocimiento colectivo,propiciando la reflexión, la crítica y la creatividad así comoel fortalecimiento de la identidad, con la proyección de la formade vida de la comunidad hacia adentro y hacia fuera de ella.

El proyecto se vio beneficiado en este mes por la convocatorianacional de “Voces en Movimiento” del Programa Nacional deÓpera y Canto Infantil y Juvenil con el cual se busca generar unMovimiento Nacional Coral que englobe a las agrupaciones coralescomunitarias y a las agrupaciones de voces, además de participaren la reconstrucción del tejido social. Desde entonces, bajo ladirección musical de Brenda Mendoza Villagómez y la direcciónescénica de Pedro Emmanuel Hernández Ortíz 40 niños de entre 6y 15 años se han sumado a este coro del semidesierto.

Los pequeñosartistas

Han sido once meses de trabajo y evolución importante en losniños que conforman este proyecto, “los niños eran tímidos alprincipio y el avance que han tenido ha sido sorprendente ygratificante por el hecho de trabajar con niños y despertarles laconciencia vocal y corporal; no tenían coordinación y la voz eramínima”, dijo Emmanuel.

Sin distinción por la edad o el sexo, los niños se reúnenpara cantar y llenos de euforia y emoción dan su mejor esfuerzo enlos ensayos para en las presentaciones poder proyectarse.

La seguridad que les ha brindado este coro, según cuentan, laproyectan en su día a día; ahora los recreos escolares losdisfrutan cantando y bailando en los patios de su escuela, “luegome dicen,¿estás loca? porque estoy cantando sola, pero no meimporta y lo sigo haciendo”,  contó una de las niñas.

Los beneficios que este coro ha traído también han sidoevidentes para los padres de los niños que lo integran, Rosayselade Santiago es una de las mamás que con emoción llevan a sus doshijas al coro, una de 15 y otra de 13, “siempre se sientenemocionadas por venir al coro (…) les ha servido mucho paradesenvolverse y mostrar sus emociones”, dijo.

La identidad

Dentro de su repertorio montan canciones como “La bruja” y“Alas de malala” sin embargo como parte de su compromiso comocoro comunitario además de rescatar la actividad artística ycotidiana, también está el no perder las tradiciones y asíreforzar la identidad comunitaria. Actualmente llevan a cabo unainvestigación de canciones para su traducción al hñäñhu,“cada vez menos gente habla hñäñhu y para nosotros es muyimportante que los niños se involucren con esta lengua”, dijoBrenda.

Son pocos los niños dentro de este grupo que hablan hñäñhu yen su mayoría se sienten avergonzados de que los demás sepan,aún así los programas que han presentado en pasados conciertosincluyen canciones náhuatl, huichol y raramuri, sin dejar de ladosus indumentarias típicas de la región.

Son dos coros comunitarios los que hay en el estado y Thuju NeNjohya, como parte de su identidad destacan la cuestión escénica.A diferencia de los coros “comunes”, en lugar de estarestáticos, cantan y se expresan corporalmente ya sea con gestos,movimientos o desplazamientos.

 El futuro delcoro

El proyecto se vio beneficiado por el Programa Nacional deÓpera y Canto Infantil y Juvenil hasta el pasado marzo, a partirde ese momento se independizó y pasó a ser un grupo con enlace dela Secretaría de Cultura, institución que garantizó su apoyohasta diciembre de este año. Pese a la incertidumbre si la SECULTseguirá otorgando su apoyo, los maestros quieren la continuidaddel proyecto a las posibilidades que tienen.

A lo largo de este año han tenido presentaciones en la plazapública de Tolimán e incluso presentaciones en la capital delestado; ahora se preparan para participar dentro de la feria, asícomo la vigésimo primera edición del Encuentro Nacional deComunidades Indígenas que se realizará en Querétaro el próximoagosto.

Movimiento,expresión e identidad comunitaria para sus 40integrantes Tolimán, Qro.- En la casa decultura de Tolimán, cerca de 40 niños corren de lado a lado,brincan, se divierten y se alistan para su clase de canto. Losviernes y sábados se han convertido en su días favoritos, ya quese reúnen para interpretar canciones del dominio popular mexicanoy algunos clásicos infantiles de Cri-Crí, como parte delrepertorio que aprenden en el coro “Thuju Ne Njohya” (canto yalegría).

“Thuju Ne Njohya” (canto y alegría) es el coro comunitarioque surgió en agosto del año pasado fundamentado como un espaciodonde los integrantes construyen un autoconocimiento colectivo,propiciando la reflexión, la crítica y la creatividad así comoel fortalecimiento de la identidad, con la proyección de la formade vida de la comunidad hacia adentro y hacia fuera de ella.

El proyecto se vio beneficiado en este mes por la convocatorianacional de “Voces en Movimiento” del Programa Nacional deÓpera y Canto Infantil y Juvenil con el cual se busca generar unMovimiento Nacional Coral que englobe a las agrupaciones coralescomunitarias y a las agrupaciones de voces, además de participaren la reconstrucción del tejido social. Desde entonces, bajo ladirección musical de Brenda Mendoza Villagómez y la direcciónescénica de Pedro Emmanuel Hernández Ortíz 40 niños de entre 6y 15 años se han sumado a este coro del semidesierto.

Los pequeñosartistas

Han sido once meses de trabajo y evolución importante en losniños que conforman este proyecto, “los niños eran tímidos alprincipio y el avance que han tenido ha sido sorprendente ygratificante por el hecho de trabajar con niños y despertarles laconciencia vocal y corporal; no tenían coordinación y la voz eramínima”, dijo Emmanuel.

Sin distinción por la edad o el sexo, los niños se reúnenpara cantar y llenos de euforia y emoción dan su mejor esfuerzo enlos ensayos para en las presentaciones poder proyectarse.

La seguridad que les ha brindado este coro, según cuentan, laproyectan en su día a día; ahora los recreos escolares losdisfrutan cantando y bailando en los patios de su escuela, “luegome dicen,¿estás loca? porque estoy cantando sola, pero no meimporta y lo sigo haciendo”,  contó una de las niñas.

Los beneficios que este coro ha traído también han sidoevidentes para los padres de los niños que lo integran, Rosayselade Santiago es una de las mamás que con emoción llevan a sus doshijas al coro, una de 15 y otra de 13, “siempre se sientenemocionadas por venir al coro (…) les ha servido mucho paradesenvolverse y mostrar sus emociones”, dijo.

La identidad

Dentro de su repertorio montan canciones como “La bruja” y“Alas de malala” sin embargo como parte de su compromiso comocoro comunitario además de rescatar la actividad artística ycotidiana, también está el no perder las tradiciones y asíreforzar la identidad comunitaria. Actualmente llevan a cabo unainvestigación de canciones para su traducción al hñäñhu,“cada vez menos gente habla hñäñhu y para nosotros es muyimportante que los niños se involucren con esta lengua”, dijoBrenda.

Son pocos los niños dentro de este grupo que hablan hñäñhu yen su mayoría se sienten avergonzados de que los demás sepan,aún así los programas que han presentado en pasados conciertosincluyen canciones náhuatl, huichol y raramuri, sin dejar de ladosus indumentarias típicas de la región.

Son dos coros comunitarios los que hay en el estado y Thuju NeNjohya, como parte de su identidad destacan la cuestión escénica.A diferencia de los coros “comunes”, en lugar de estarestáticos, cantan y se expresan corporalmente ya sea con gestos,movimientos o desplazamientos.

 El futuro delcoro

El proyecto se vio beneficiado por el Programa Nacional deÓpera y Canto Infantil y Juvenil hasta el pasado marzo, a partirde ese momento se independizó y pasó a ser un grupo con enlace dela Secretaría de Cultura, institución que garantizó su apoyohasta diciembre de este año. Pese a la incertidumbre si la SECULTseguirá otorgando su apoyo, los maestros quieren la continuidaddel proyecto a las posibilidades que tienen.

A lo largo de este año han tenido presentaciones en la plazapública de Tolimán e incluso presentaciones en la capital delestado; ahora se preparan para participar dentro de la feria, asícomo la vigésimo primera edición del Encuentro Nacional deComunidades Indígenas que se realizará en Querétaro el próximoagosto.

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