Canastas adornadas con flores, dulces y papeles de colores,acompañan a los Niños Dios, que vestidos con sus ropones blancos,recuerdan la Presentación del Niño Jesús en el Templo y lapurificación de la Virgen María cuarenta días después delparto, en un tradicional Día de la Candelaria que se celebró ayeren todas los templos de la Diócesis de Querétaro.
Los fieles católicos acudieron a las ceremonias eucarísticasque a lo largo del día se llevaron a cabo en los templos de laciudad, donde además se bendijo a los niños vivos, quienesrepresentan la luz y la esperanza de la sociedad.
“Estos niños chiquitos en representación de todos los niñosdel mundo, ustedes los van a representar, así como a Jesús lollevaron al templo, hoy ustedes vienen al templo”, reconoció elvicario general y vocero de la Diócesis de Querétaro, MartínLara Becerril, en la homilía que ofreció en el templo de SantaRosa de Viterbo.
Explicó que esta celebración es un recuerdo del pasajebíblico de la Presentación del Niño Jesús en el Templo deJerusalén y la purificación de la Virgen María después delparto, para cumplir la prescripción de la Ley del AntiguoTestamento.
Además dijo que el significado de los tamales que se repartenen esta celebración, representa a los pequeños hijos de la madretierra, el maíz tierno que envuelto en sí mismo y cocido en elinterior de una olla, es la matriz.
“El tamalito viene en su hojita, esa hojita representa lospañales del Niño Dios, el vestido del Niño Dios con el cual loenvolvemos….por eso el día de la Candelaria come uno tamales,porque es el pan vivo bajado del cielo, sabroso que alimenta”,aseguró Lara Becerril.
Tras la bendición de los niños, el sacerdote reconoció quecon esta celebración se conmemora a Jesús como luz de lasnaciones, por lo que pidió a los pequeños ser esa misma esperanzapara el futuro del país.
Cabe mencionar que la fiesta de la Virgen de la Candelaria esuna tradición con raíces prehispánicas, pues el 2 de febrerocoincide con el onceavo día del primer mes del antiguo calendarioazteca, cuando se celebraba a los dioses tlaloques.