Al ser el centro cultural BEMA un espacio privado, deberá de resolverse entre particulares el conflicto que sostienen con el barrio de San Francisquito, afirmó Paulina Aguado Romero, secretaria de Cultura de Querétaro.
La Asamblea del Barrio de San Francisquito emitió hace unos días un pronunciamiento donde acusan que el centro cultural BEMA es excluyente y sus eventos no contemplan las necesidades y problemas reales del barrio.
“Este es un asunto entre particulares, entonces, entre particulares es como se debe de resolver porque son propietarios de una colonia, de distintos inmuebles”, declaró.
En tanto, aunque los habitantes del barrio de San Francisquito han manifestado estar en contra de proyectos como el eje Zaragoza por la afectación a su cultura, aún no existen acercamientos a la Secretaria de Cultura, de acuerdo con Aguado Romero.
En el pronunciamiento emitido por la Asamblea del Barrio de San Francisquito, el BEMA es rechazado por los habitantes porque sostiene relación con empresarios y políticos que promueven la idea de crear un corredor turístico lo que gentrificaría a San Francisquito y pondría en riesgo la identidad y cultura de la zona.
“Si San Pancho se gentrifica, toda nuestra cultura, identidad y tradiciones se perderán o se convertirán en una mercancía para el turismo”, subrayaron.
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