Actualmente la droga de mayor impacto en Querétaro es el cristal, toda vez que el 90% de los usuarios que entran a los diferentes centros de rehabilitación de adicciones, es por consumo de esta droga sintética.
Así lo señalaron Jonathan Laguna y Rafael Ayala Villar, presidente y tesorero, respectivamente, de la Asociación Queretana de Centros Especializados en Adicciones (AQCEA), quienes agregaron que desde hace cuatro o cinco años a la fecha, incrementó el consumo de drogas en mujeres.
“Aquí en Querétaro la droga de mayor impacto en este momento es el cristal, estamos hablando que un 90% de los usuarios que ingresan a los centros de rehabilitación entran por consumo de cristal, otras sustancias como el alcohol o la marihuana quedan como parte secundaria”, dijeron.
Advirtieron que el consumo de esta droga es muy preocupante en el estado, porque está alcanzando a los jóvenes, debido a que es muy fácil de adquirirla, además de que su costo es demasiado recudido.
Jonathan Laguna señaló que hoy las delegaciones con más índices de adicciones son Félix Osores y Epigmenio González. También advirtió que hay muchos usuarios entre 16 y 23 años de edad dentro de los centros de rehabilitación.
El 27 de mayo firmarán un compromiso para que el 80% de los centros que integran la AQCEA, califiquen de manera aprobatoria ante la Comisión Estatal contra las Adicciones (CECA), y obtener el pase para la certificación de la Comisión Nacional contra las Adicciones (CONADIC).
Advirtieron que la normatividad que hoy existe en la entidad para operar los centros de rehabilitación es nula, “realmente es muy básica, por lo tanto existen muchos centros de rehabilitación que no se encuentran registrados o que no tenemos conocimiento”.
Informaron que la AQCEA tiene afiliados 14 centros de rehabilitación en todo el estado, entre ellos los municipios como Querétaro, San Juan del Río, Amealco, Huimilpan y El Marqués; cada centro de rehabilitación tiene un promedio de 30 usuarios.
Finalmente, señalaron que hay 150 centros de rehabilitación en el municipio capitalino, de los cuales solo un 50% están registrados ante el CECA.