A nueves meses de suspendido el apoyo federal a las estancias infantiles para entregar el dinero directamente a los padres de famiia beneficiarias y para que sean “las abuelitas” quienes cuiden a los menores, la ocupación de estos centros de desplomó hasta 50%.
Según testimonios, muchos de los niños que desertaron al recibir sus padres directamente 800 pesos al mes como parte del Programa de Apoyo para el Bienestar para Niñas y Niños Hijos de Madres Trabajadoras no fueron a parar a casa de sus abuelitas sino a preescolares particulares en cuya mensualidad se usa el apoyo recibido.
Eso sí, padres de familia consultados se quejan de que ahora, sin el apoyo directo a las estancias, son ellos quienes deben hacer un tortuoso trámite cada mes por el pago de este beneficio.
María, beneficiaria explica que desde que se hizo el cambio del programa, ahora se les paga la cantidad de 800 pesos al mes por menor, pero los papás casi no le apoyan con el cuidado de su hija.
“Me gusta más el cuidado que brindan las estancias, ahora tenemos que ir a recoger el pago, la persona que nos entrega el programa, tenemos que ir a su domicilio o en un jardín, te dan el vale y tienes que ir a cobrarlo a Telégrafos pero son unas filas muy largas”.
En razón de la nueva medida gubernamental, que trajo consigo recortes federales en el ámbito nacional, en Querétaro se redujo al 50% la población infantil en las estancias, de acuerdo a información de la legisladora Beatriz Marmolejo publicada durante esta semana.
A inicios de este 2019 la Federación realizó un recorte a 10 mil estancias infantiles, que operaban bajo el esquema de la extinta Secretaría de Desarrollo Social, estos espacios dejaron de recibir 2 mil 28 millones de pesos.
María González, encargada del Programa de Apoyo para el Bienestar para Niñas y Niños Hijos de Madres Trabajadoras de la Secretaría del Bienestar, explicó que en Querétaro había un promedio de 160 estancias registradas, brindando servicio a cerca de 4 mil menores.
¿Y LAS ABUELITAS?
Actualmente se entrega el apoyo directamente a 2 mil 754 mamás para que sean ellas quienes decidan si continúan llevando a sus hijos a las estancias infantiles o le pagan a alguien más para cuidar a sus niños mientras trabajan.
“Aquí no ha habido casos que nos hayan dicho que los abuelitos son quienes los cuidan, hubo una mamá que cambió de estancia y le pidió a su mamá que la apoyara, pero no tenemos certeza si le pagó”.
La directora de una estancia infantil en el municipio de Corregidora, quien pidió omitir su nombre reconoció que son los mismos abuelos quienes llevaban a los menores a las estancias para brindarles mejor atención.
“La mayoría de las personas que traían a los niños me decían que traían a los nietos porque a veces no podían o no tenían la paciencia, a nosotros nos capacitaron, tenemos actividades lúdicas, recreativas con un programa educativo completo”.
Lisett Azani Ochoa, directora de la estancia infantil Nueva Creación, explicó que es necesaria una formación con los esquemas de desarrollo para los niños que implementan en la capacitación que han recibido.
“Realmente si los dejan en casa (a los niños) me parece algo muy grave del Gobierno Federal, jamás se va a comparar la educación y el desarrollo social de un niño en una escuela que en una casa mientras ven la televisión mientras los abuelitos están haciendo sus propias cosas”.
Explicó que los casos de los abuelitos, son ellos quienes apoyan en llevarlos y traerlos a las estancias, pero muy pocos son quienes cuidan en casa de los niños, pues tienen que cocinar o preparar alguna actividad y la mayoría ya no tiene el tiempo de desarrollar estas actividades.
