Hasta el momento no hay una afectación por la imposición de un arancel de una tasa del 17.5 al jitomate mexicano, afirmó Carl Heinz Dobler Mehner, secretario de Desarrollo Agropecuario en Querétaro, quien consideró esta medida como una condición ligada a una estrategia política de Estados Unidos.
“Ahorita de momento, todavía no hay una afectación como tal. Es una condición que está ligada a una estrategia política por parte del gobierno de Estados Unidos. No se han suspendido las conversaciones, que eso es un muy buen punto (...) Nuestra apreciación es que es una cuestión de tipo político, momentáneamente en Estados Unidos”, declaró.
Dobler Mehner subrayó que no es “definitivo” la imposición del arancel; sin embargo, dijo, esta medida repercutirá en los consumidores norteamericanos, quienes absorberán el incremento en el precio del producto.
“Nosotros consideramos que es una estrategia mal diseñada para ellos, porque va a afectar a la población también allá. Ahorita, momentáneamente mientras no se suspendan queda en garantía, es como una fianza este arancel”, dijo.
De acuerdo con el secretario estatal, la imposición del arancel afectará principalmente, a los pequeños productores, pues tienen un margen utilidad menor. Detalló que estos en Querétaro, están localizados en la zona de Huimilpan o en Concá, en la Sierra Gorda.
Asimismo, subrayó se esperará una posición “más sólida” por parte de las autoridades mexicanas para que se impongan a su vez, aranceles a los productos estadounidenses.
“Aquí lo que estamos esperando es una posición más sólida por parte del gobierno mexicano, en la cual el gobierno mexicano, como negociación también imponga aranceles a productos que se están importando de Estados Unidos. De tal manera, que sea una carta de negociación, con la finalidad de que no se suspendan las negociaciones y no se inicie realmente, se le dé continuidad a la investigación de domping”, agregó.