Mariana Moguel Robles, hija de Rosario Robles, en su visita a Querétaro, señaló inconsistencias en el proceso legal que enfrentó la también exsecretaria de Estado del sexenio de Enrique Peña Nieto, por lo que reiteró la falta de justicia que impera en el país, así como una venganza por parte de gobierno federal.
En ese sentido, mencionó que en diciembre de 2021 inició una resistencia pacífica en contra del aprisionamiento de Rosario Robles y que, a partir de noviembre, recibió el acompañamiento de dos visitadores de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) donde denunció actos de tortura y falsificación de pruebas.
Refirió, además, que hay 78 agravios desde el momento de la aprehensión de Rosario Robles y una serie de violaciones a los derechos humanos en los que sostuvo está implicado el juez Felipe de Jesús Delgadillo Padierna, sobrino de Dolores Padierna, a quien acusó de tener conflicto de interés en la resolución en el caso.
"El juez Delgadillo Padierna, sobrino de Dolores Padierna, esposa de René Bejarano, quienes han dicho explícitamente ser enemigos de mi madre, ha tenido un conflicto de interés. La misma Corte Interamericana marca que un juez imparcial es cuando no hay conflicto de intereses y debió haberse excusado", señaló.
Añadió que la situación de Rosario Robles es uno de tantos en el país, donde mujeres y hombres han sido víctimas de la falta de certeza jurídica y que contraviene los derechos humanos, por lo que es una situación que compete a la ciudadanía en general la falta de transparencia y omisión, así como de impunidad en el sistema de justicia.
"Somos casos públicos que agradezco nos permitan voz, pero hay muchos hombres y mujeres que no tienen estos espacios para contar las inconsistencias de sus procesos y de este triste fenómeno de corrupción que acompaña el sistema de justicia penal y que se acentúa durante este trienio donde se ha consolidado una justicia punitiva en vez de restaurativa", indicó.
Moguel Robles enfatizó en que, derivado de este caso, ha promovido procesos a favor de mujeres injustamente detenidas en el que han logrado liberar a ocho, además de trabajar en otros 40 expedientes de personas que la han buscado a raíz de su campaña en defensa de la libertad de personas en prisión con una situación similar a la de su madre.
"Hay mujeres y hombres que no pueden tener una legítima defensa o debido proceso porque no tienen para pagar un abogado. Que en el Ministerio Público encuentran este terrible fenómeno de corrupción. Hay mujeres que, más allá de los colores de partido, perseguimos una causa que se llama justicia", concluyó.