Parada de camión de Avenida 5 de Febrero, fuera de la UAQ. Miércoles 10 de junio, 13:30 horas.
Un grupo de personas lee las noticias recientes en sus teléfonos mientras esperan el autobús. De entre todos, sobresale un hombre que lejos de informarse en las plataformas digitales por medio de su teléfono, tiene en sus manos un ejemplar de Diario de Querétaro que hoja por hoja, analiza minuciosamente.
“Tengo 50 años y desde que tenía 6 soy lector del Diario”, afirma el señor Juan Manuel, quien recuerda como su abuelito, don Hilario Ortiz, le inculcó el gusto por la lectura del periódico, una tradición que a la actualidad sigue respetando y prefiriendo por encima de informarse en redes sociales o algún otro medio.
Para él, no hay nada mejor que tener en las manos un ejemplar “del periódico mas importante del estado”, pues asegura, la información es veraz y oportuna, sobre todo, prefiere enterarse en las páginas del Diario sobre la pandemia del coronavirus y la cobertura que reporteros y fotógrafos de este impreso han realizado, arriesgándose a salir en la cobertura periodística.
Recuerda como Diario de Querétaro ha sido parte importante de su vida. “Yo jugaba futbol en el San Javier y los fotógrafos del Diario iban a sacarnos las fotos en cada partido, no recuerdo si un señor Fernando o Don Beto, pero siempre estaban ahí”.
Comenta que el gusto por el periódico impreso es una tradición en su familia, misma que les inculca a sus hijos, uno de 21 años que es estudiante de la UAQ y los mas pequeños de 7 y 12 años; “todos buenos muchachos, todos lectores del periódico, pero ninguno me salió futbolista”, lamenta entre risas.
A manera de mensaje, comparte con sus hijos las enseñanzas de su padre y su abuelo, asegurando que lo importante es que no dejen ellos de estudiar, prepararse y tomar las armas necesarias para enfrentar la vida porque algún día, él no podrá estar ahí para ver por ellos.
“Saludos a todos en el Diario, cuídense mucho”, dice antes de subirse al camión y despedirse.
