La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Defensoría de Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ) llevaron a cabo el evento de clausura del curso "Documentación e investigación de tortura y tratos crueles inhumanos y degradantes, aplicación de los principios y directrices del Protocolo de Estambul", proyecto realizado por médicos y psicólogos.
Ante la presencia de activistas y personal de seguridad pública, se presentaron los diversos avances y procesos en torno al Protocolo de Estambul, cuyo informe fue basado en dictámenes que dan pauta para información sobre el caso y cómo atender estas afectaciones en la ciudadanía como parte de la agenda de Derechos Humanos.
"No podemos partir de la idea de que todas las personas que han sido víctimas de tortura tendrán una aplicación física o psicológica, sino que hay diferentes tipos, por lo que es importante que tengamos a consideración diversos elementos para aplicar la justicia" , refirió Ángela Elizabeth Aguilera Hernández, analista del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNPT) de la CNDH.
Para investigar y documentar los incidentes de tortura y otras formas de maltrato, así como castigar a los responsables de manera completa, efectiva e imparcial, en 1999, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) adoptó el Protocolo de Estambul, manual elaborado por más de 75 expertos en leyes, salud y derechos humanos.
Al respecto, señaló que este protocolo proporciona el primer conjunto de directrices reconocido internacionalmente para los médicos y abogados sobre cómo determinar si una persona ha sido torturada y cómo documentar los síntomas, por lo que la documentación puede servir como prueba válida e independiente ante un tribunal.
En tanto, María Esther Juárez Mendoza, visitadora adjunata del MNPT ahondó en el proceso y las dictaminaciones de este protocolo, así como los conceptos al respecto, y el cómo se trabaja y aborda, donde destacó la labor ética en torno a la inestigación y análisis respecto a la tortura.
“Hay que hacer diferenciación entre lo que es el dictamen médico-psicológico y el protocolo, lo que es este manual que contendrá las directrices y procedimiento para llevar a cabo la dictaminación de estos asuntos, así pues vemos que a nivel internacional y nacional el protocolo ha sido impulsado y fortalecido”, indicó.
Finalmente, las ponentes ahondaron en la relevancia de conocer este protocolo y darlo conocer a las instancias públicas para una mejor resolución de asuntos relacionados a la tortura, así como las denuncias, donde hicieron énfasis en evitar los prejuicios en torno a los testimonios de víctimas y buscar mayor empatía.