/ miércoles 27 de octubre de 2021

La pista | Construyendo un legado

“La diferencia entre lo posible y lo imposible está en la determinación de la persona”, o lo que es lo mismo: las cosas son tan imposibles como imposibles nosotros mismos nos las hagamos. Y así lo demostró el maratonista Germán Silva al ganar de forma inusual en 1994 la maratón de NY y sea por eso una leyenda viva.

La actitud es un estado mental. Influyen muchas cosas para esto, el entorno condiciona pero es mayor el condicionamiento que impone nuestro propio sentido común y nuestra voluntad.

Así lo demostró Germán Silva al dar una vuelta a la derecha que le cambió la vida, en el kilómetro 41 de aquel 6 de noviembre del 94, cuando disputaba un mano a mano con el también mexicano Benjamin Paredes. Germán cuenta que iba concentrado en la moto Guía, la moto da la vuelta a la derecha faltando 800 metros para la meta de los 42 kilómetros y 195 metros.

Y es aquí donde está el gran, gran mérito de Germán Silva. Corregir inmediatamente y volver a tomar el rumbo. German no sólo alcanzó a Paredes lo paso y lo dejó 40 metros atrás, corriendo su kilómetro más rápido en 2 minutos 50 segundos, y si fue su kilómetro más rápido del 41 al 42, eso nos dice la gran mentalidad que tiene Germán.

Germán es conocido en NY y respetado en el mundo maratonista como el hombre de la vuelta equivocada. Sin duda lo que hemos comentando durante semanas en esta columna en el sentido de cómo afrontando las vicisitudes vienen las grandes recompensas. Es difícil vencer a esa persona que nunca se rinde.

“Construye tus debilidades, hasta que se conviertan en tus puntos Fuertes”. Así piensa Germán que en 1995 volvió a ganar la maratón de NY.

Ahora Germán Silva se ha impuesto ahora un nuevo reto: El Proyecto “Pinole, corriendo por las venas de México”, correr 128 maratones en 117 días, recorriendo 19 estados de nuestro país

Durante el trayecto, que durará cerca de 4 meses, Germán Silva trotará 5 mil 400 kilómetros y sólo en algunas etapas podrán correr con los aficionados.

Germán Silva, queretano como muchos por adopción, ha sido reconocido por politicos, como el Gobernador Mauricio Kuri, el Alcalde Luis Bernardo Nava, Santiago Nieto titutlar de la UIF, en las carreras y más en este proyecto “Pinole, corriendo por las venas de México”, donde los colores que trascenderán las fronteras nacionales son, nada más y nada menos, los de la bandera de México.

Germán Silva sigue construyendo un gran legado, de esos que sólo las grandes almas son capaces de generar.

“La diferencia entre lo posible y lo imposible está en la determinación de la persona”, o lo que es lo mismo: las cosas son tan imposibles como imposibles nosotros mismos nos las hagamos. Y así lo demostró el maratonista Germán Silva al ganar de forma inusual en 1994 la maratón de NY y sea por eso una leyenda viva.

La actitud es un estado mental. Influyen muchas cosas para esto, el entorno condiciona pero es mayor el condicionamiento que impone nuestro propio sentido común y nuestra voluntad.

Así lo demostró Germán Silva al dar una vuelta a la derecha que le cambió la vida, en el kilómetro 41 de aquel 6 de noviembre del 94, cuando disputaba un mano a mano con el también mexicano Benjamin Paredes. Germán cuenta que iba concentrado en la moto Guía, la moto da la vuelta a la derecha faltando 800 metros para la meta de los 42 kilómetros y 195 metros.

Y es aquí donde está el gran, gran mérito de Germán Silva. Corregir inmediatamente y volver a tomar el rumbo. German no sólo alcanzó a Paredes lo paso y lo dejó 40 metros atrás, corriendo su kilómetro más rápido en 2 minutos 50 segundos, y si fue su kilómetro más rápido del 41 al 42, eso nos dice la gran mentalidad que tiene Germán.

Germán es conocido en NY y respetado en el mundo maratonista como el hombre de la vuelta equivocada. Sin duda lo que hemos comentando durante semanas en esta columna en el sentido de cómo afrontando las vicisitudes vienen las grandes recompensas. Es difícil vencer a esa persona que nunca se rinde.

“Construye tus debilidades, hasta que se conviertan en tus puntos Fuertes”. Así piensa Germán que en 1995 volvió a ganar la maratón de NY.

Ahora Germán Silva se ha impuesto ahora un nuevo reto: El Proyecto “Pinole, corriendo por las venas de México”, correr 128 maratones en 117 días, recorriendo 19 estados de nuestro país

Durante el trayecto, que durará cerca de 4 meses, Germán Silva trotará 5 mil 400 kilómetros y sólo en algunas etapas podrán correr con los aficionados.

Germán Silva, queretano como muchos por adopción, ha sido reconocido por politicos, como el Gobernador Mauricio Kuri, el Alcalde Luis Bernardo Nava, Santiago Nieto titutlar de la UIF, en las carreras y más en este proyecto “Pinole, corriendo por las venas de México”, donde los colores que trascenderán las fronteras nacionales son, nada más y nada menos, los de la bandera de México.

Germán Silva sigue construyendo un gran legado, de esos que sólo las grandes almas son capaces de generar.

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