“No hay fecha ni plazo que no se venza”, escribió Laura Banda en aquella nota del 2019 que anunciaba el cierre de la Maquiladora Hércules, luego de 174 años de su creación y de haberse convertido en la base del desarrollo industrial en el estado. La periodista recuerda esa noticia con sentimientos encontrados, justo en un momento en el que ella también cierra un ciclo en su carrera.
Luego de 29 años de trabajo ininterrumpidos en Diario de Querétaro, Laura se despide de esta casa editorial, aunque asegura que las anécdotas, experiencias y el mismo periodismo se van con ella.
Laura Banda entró al periódico con apenas 24 años de edad, cuando la editorial se encontraba en la calle Escobedo y el director era Luis Amieva. Fue el jefe de Información de aquel entonces, Jesús Aguilar, quien la convenció de dejar la radio y de unirse a las filas de la prensa escrita.
Era 1992 cuando la joven reportera aceptó aquella oferta y el “boom” de las notas económicas se avizoraba. Laura era la única mujer que trabajaba en información general, porque lo usual era que las mujeres escribieran secciones como Sociales o Espectáculos.
Le fue asignada la “fuente” que desde entonces ha seguido y en la que hoy es un referente del periodismo queretano: la iniciativa privada.
“Me tocó tocar puertas y fue muy difícil conseguir que me aceptaran en el gremio y ganarme la confianza de los empresarios, nunca ha sido un sector sencillo”, recuerda la periodista: “Me decían ` niña´ porque pues sí, estaba recién empezando la actividad, nadie me conocía”.
PLUMA DE 8 Y EXCLUSIVAS
Aunque con timidez en la “fuente”, Laura se “lanzó al ruedo” y comenzó hacer preguntas como sus colegas; así fue como poco a poco se ganó su lugar y empezó a escribir las noticias más importantes en aras de conseguir la nota principal, “la de 8”.
“Me tocó cubrir todas las cumbres de negocios y entrevistar a gente muy importante, como a ex presidentes (Lech Walesa, “Lula” da Silva, Laura Chinchilla) y directivos de empresas transnacionales. Pero una nota que recuerdo mucho y que será porque yo soy de Hércules, fue el lamentable cierre de Textiles Hércules después de más de 100 años. Me dio gusto tener la exclusiva, pero también tuve sentimientos encontrados porque fue una tradición que se acabó; dio empleos por años y no solo a gente de Hércules, sino también de la capital y del municipio de El Marqués.
“También me tocó escribir sobre el cierre de tiendas que tenían años; fui testigo de cómo la modernidad y la tecnología las acabó, como cuando Sears se fue del Centro Histórico después de más de 40 años, también fue una exclusiva de nosotros.
“Siempre traté de llevarme en exclusiva la información y lograr `la de 8´. Por ahí me decían: ¿y te pagan más cuando te llevas `la de 8´? (risas), ojalá fuera así… pero no, la verdad no. Solo es ese gusanito que te motiva a reportear y traer primero la nota. Te pones la camiseta de la empresa y dices: yo voy a buscarla…”.
MÁS MUJERES
A Laura Banda no le gusta decir que su trabajo también abonó a que más periodistas queretanas escribieran sobre temas no asociados a roles tradicionales de género, pero celebra que cada vez haya más reporteras en las calles y en las redacciones.
“Cuando llegué al Diario de Querétaro había puros periodistas hombres, como Lauro Jiménez, Jesús Aguilar, Fernando Espinoza, Miguel Hernández… gente que ya tenía muchos años y ‘fuentes’ asignadas. Mucho tiempo fui la única mujer en información general, contrario ahora que somos más mujeres y hay pocos hombres en el periódico; eso demuestra que sí se han ido abriendo esos espacios y poco a poco hemos avanzado”.
Pero los cambios no solo los ha visto en Diario de Querétaro y en el periodismo queretano, también los observa en el sector que ella ha documentado de cerca.
“Querétaro se ha transformado. Empezó siendo una entidad agrícola, textil y luego vino el boom del desarrollo económico en los 90´s, a mí te tocó. Ahí tomó relevancia la fuente de la iniciativa privada porque Querétaro es totalmente industrial. Al sector también comenzaron a llegar mujeres, aunque ha sido más lento. Me tocó ver llegar por primera vez a una mujer a una cámara, fue en la Canaco (Alejandra González Tostado); ya después llegó Lorena Jiménez a la Coparmex y Beatriz Hernández alcanzó la presidencia de los microempresarios; en el sector inmobiliario también se observaron esos cambios así como en los colegios; actualmente la dirigente de la FECAPEQ es mujer, hay más mujeres ocupando esos cargos en la iniciativa privada”.
CERRAR CICLOS
Como todo en la vida, dice Laura Banda, hay que cerrar ciclos: “El mío ya llegó a su fin en el Diario, hay que dar paso a las nuevas generaciones. En información general fui la última de la vieja escuela y me toca cerrar esa puerta”.
Antes de partir, la periodista agradece el apoyo de todo el equipo en Diario de Querétaro, así como el impulso del actual director, Mario León Leyva, quien -asegura- ha traído un nuevo aire a la editorial.
Laura Banda también celebra los cambios positivos que ve ahora en el periodismo queretano, pero lamenta el declive que ha tenido el sector en cuanto a derechos laborales.
“Hay mucha rotación, ojalá algún día logremos que haya mejores condiciones para los compañeros; muchos lamentablemente no cuentan con ninguna prestación: ni seguridad social ni Infonavit y todos trabajamos por necesidad. Ahí es donde considero que hay un rezago y ojalá se pueda hacer algo, aunque sí ha habido muchísimos intentos organizados: la Asociación de Periodistas del Estado de Querétaro, y luego surgieron otras organizaciones. Yo pertenecí a esa, y después hubo varios intentos de mujeres bien aguerridas que crearon la Asociación de Mujeres Periodistas, lamentablemente tampoco funcionó. Se buscaba impulsar mejores condiciones laborales, crear guarderías para los hijos... y hasta el día de hoy siguen siendo temas pendientes”.
