Ante la crisis actual, comerciantes y locatarios del Mercado Escobedo piden a las autoridades que los capaciten en materia de tecnología, ya que en ese tema van muy rezagados respecto de los negocios que les representan competencia.
Ana Karen Santana, locataria del área de pescados y mariscos preparados, señaló que la brecha de condiciones tecnológicas creció con la llegada de la pandemia por Covid-19, ya que si los locatarios contaran con al menos redes sociales y una página web con información básica forma de contacto.
“Somos solo dos locatarios quienes tenemos redes sociales y página web para pedidos. Yo la tengo desde hace 8 años, y hasta registramos la marca. Entonces, todas las herramientas de la web eran gratuitas y ahora ya tienes que pagarlas”
Al reconocer que este mecanismo de consumo representa ya una parte importante de sus ventas, desde que comenzó la pandemia por Covid-19, lamentó que sus colegas no cuenten con una, por lo que instó a las autoridades a apoyar en esa materia.
Consideró que este apoyo tecnológico y capacitación debería otorgárseles a todos los giros de venta en el Mercado Escobedo, ya que igualmente, otros negocios como las verduras, cárnicos, ropa, abarrotes y cremerías, y la generalidad no mencionada, tendrán que ponerse al día en la materia o esperar un proceso de quiebre.
Y es que, de por sí, ya varios están a punto de la quiebra, con la esperanza de que la época de Cuaresma 2021, sea su salvación para mejorar los ingresos por ventas.
Detalló que, entre los cierres por distanciamiento social, la aplicación de “ley seca” por parte de las autoridades, y la carestía, el año 2020 se constituye como el que más ha castigado sus ingresos.
“Por ejemplo, la cerveza se hacían dos pedidos por semana; ahora es uno por mes. Y si tomamos en cuenta los camarones y demás, el margen de utilidad es muy reducido porque nosotros no estamos en condiciones de elevarle los precios a nuestros clientes”, explicó.
Asimismo, indicó que el monto de gastos diarios del negocio no ha cambiado, ya que, si el año pasado se compraban 700 pesos para los diversos vegetales que se ocupan en las recetas, y este año también, solo que para un volumen menor de venta.
Otro indicador de que han caído las ventas es que, por el bajo consumo que ha tenido el producto, la merma es mayor, al tratarse de productos del mar, cuya indicación es que una vez congelados, no pueden congelarse de nuevo.