El término de la temporada vacacional obliga a los paseantes a programar su regreso lo más temprano posible pues, en caso contrario, las largas filas serán una realidad ineludible. Lo anterior es un análisis al que llegaron la mayoría de los paseantes que platicaron a DIARIO DE QUERÉTARO durante su paso por la Terminal de Autobuses de Querétaro (TAQ).
Entre quienes aprovecharon esas tempranas horas se encontraron Victoria, Jorge y Georgina, quienes sabían que sería un día pesado, pero querían hacerlo rendir, al acudir a una exposición programada en la capital queretana y, que al planear con tiempo lograron librarse de contratiempos.
Paola estimó que el tráfico de todos los fines de semana son pesados; se relacionen o no con el periodo vacacional; pues le ha tocado quedarse formada hasta dos horas para tomar un taxi, de ahí que lo más conveniente, dice, es que el viajante le pida a alguien con vehículo que lo espere a la hora programada de arribo.
Mientras tanto, Armando hacía fila para brindar ese servicio de taxi a los recién arribados paseantes. Narró que en esta ocasión comenzó a trabajar más tarde de lo normal, pero también permanecería más horas al frente del volante. Estimó que la tarde destacaría por la alta afluencia, de tal forma que se fijó las 24:00 horas como el límite para llevar a su último pasaje.
También Anselmo confió que sería una buena tarde en cuanto a la clientela, pero la descartó como una buena oportunidad para los taxistas, pues debían enfrentarse a calles difíciles de transitar.
“Está complicado el tránsito para llegar aquí rápido… hoy y mañana se pone de locos, como dicen por ahí… De orilla a orilla sí está complicado el tráfico. Casi no me gusta venir a la central”.
Pese a ese escepticismo, Natividad confió en que sí podría llegar a ser un buen día para los “amos del volante”, de tal forma que ampliaría su horario hasta las 22:00 hrs., para aprovechar así la tarde de alta afluencia.
Arribando de Tequisquiapan se encontró a Andrés quien sabía que en las tardes la Central registra su más alta cantidad de viajantes. Con esa información es que planeó su regreso desde las 06:30 horas, lo que le produjo satisfacción, toda vez que al llegar a Querétaro observó un tráfico que prometía ser cada vez más pesado.
Julieta trabaja en la Central y toda la semana observó un flujo importante de paseantes, estimando que el domingo podría no resultar tan pesado para quienes debieran usar el servicio. Pese a su opinión, Armando, coordinando la fila de taxis, estimó que el tráfico sería constante y cada vez mayor durante el último día vacacional.
Entre los paseantes también se encontró Mariel, quien afortunadamente sorteó un tránsito tranquilo en su regreso de Puebla, mientras que Reynaldo programó con mucho más tiempo de anticipación el boleto de autobús que lo regresaría a Querétaro, desde el aeropuerto de la Ciudad de México y explicó que a partir de su experiencia, sabía que sería una noche de tránsito intenso para los vacacionistas.
Precisamente México y Toluca se programaban como los boletos más adquiridos durante ese último día vacacional, de acuerdo a Rafael, responsable en uno de los módulos de atención, quien advirtió que pese a la alta demanda, la última “corrida” de la línea sería igual que en un domingo normal, a las 19:00 horas, retomando actividades a las 05:00 horas del lunes.
Aprovechó la visita de DIARIO DE QUERÉTARO para recomendar a los paseantes llegar con tiempo a la central, además de programar sus salidas, a fin de evadir cualquier eventualidad.
