Conocer los caminos físicos y virtuales por los que transitanlos jóvenes es responsabilidad de sus padres, alertó el obispo deQuerétaro, Faustino Armendáriz Jiménez al lamentar lo ocurridoen Monterrey, donde un joven detonó un arma contra sus compañerosde escuela y después se disparó.
Urgió a los padres a estar atentos de sus hijos, que ellos seanquienes revisen sus mochilas, pero también, que estén al tanto delos caminos físicos y psicológicos por los que transiten.
Explicó que la mejor manera de atacar una enfermedad esrealizar análisis previos y que estar pendientes delcomportamiento de los hijos es el desafío de las familiasactuales, pues en vez de esperar a que una autoridad les revise lasmochilas, son ellos los que deben saber qué portan en ellas, y sillegara a ser necesario implementar operativos en las escuelas,siempre se debe tener presente que será por el bien de los niños,pues lo que se busca no es atentar contra su privacidad y sí velarpor su bienestar.
Indicó que ese foco rojo también debe ser tomado por lasescuelas, pues es en ellas donde los padres depositan toda suconfianza para educar a sus hijos.
Enfatizó que ya no basta saber dónde se encuentranfísicamente, pues también resulta preciso conocer la forma en queutilizan las redes sociales y el tipo de relación que tienen consus amigos, además de conocerlos.
“Tienen la gran responsabilidad de ver quiénes son susamigos, incluso de formar su corazón y su mente, de formar suconciencia, esa es la gran responsabilidad de los padres”.
Respecto a la posibilidad de que los jóvenes utilicen las redessociales para realizar actos agresivos, subrayó que decomprobarse, la responsabilidad de los padres será aún mayor, altener que saber dónde se encuentran los hijos físicamente y enqué caminos de las redes sociales transitan.
“La responsabilidad de los papás es sembrar valores, pero losvalores se concentran en el Evangelio; en la medida que los papásse acerquen a Dios, van a acercar a sus hijos a Dios, no solamenteordenándoles, si no conduciéndoles con el ejemplo”.
Por último resaltó la importancia de que las escuelasrealmente fomenten valores vitales, tales como la honestidad, elrespeto y la obediencia, entre otros valores cívicos yuniversales.
“Nadie puede dar lo que no tiene, quien está ahí, al frentede un aula, al frente de una comunidad, lo tiene que hacer con elejemplo, incluida su vida fuera de la escuela”, finalizó.