De los 19 profesores que fueron cesados de la Facultad de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de Querétaro, once ya fueron reinstalados en sus cargas horarias, destacó la rectora de la casa de estudios, Teresa García Gasca, quien dijo que a estos profesores no se les encontró ninguna justificación académica para separarlos de sus clases.
Esto, luego de que la coordinadora de la Maestría en Administración denunció al actual secretario académico de la Facultad y candidato a la dirección, Martín Vivanco, como el responsable del hecho, las autoridades universitarias revisaron el caso y no encontraron ningún problema en 11 de los 19 profesores.
“Once profesores que dan clases en planes curriculares fueron revisados en su historial y desempeño académico y no encontramos justificación académica que implique cesarlos, por lo que continuarán con sus clases”, afirmó la rectora.
En cuanto a los ocho profesores restantes, García Gasca reconoció que se trata de docentes que participaron en el propedéutico, actividad que no es competencia de la Secretaría Académica, sino de cada programa educativo, por tanto están fuera de su alcance.
Mencionó que en este caso, el director de la Facultad, Arturo Castañeda Olalde, informó a la Secretaría Académica que dichos profesores no contaban con el grado académico para impartir clase, toda vez porque el propedéutico no exige tener docentes con posgrado.
“El director se acercó al secretario académico y conversaron y decía que algunos profesores no tenían grado académico pero eso sucedía para los del propedéutico, porque como el propedéutico no son curriculares tampoco es obligatorio, se trata de cursos de nivelación de conocimientos y no implica un problema que profesores que no han terminado el posgrado puedan apoyar en algunas materias pero ya en los cursos curriculares desde luego deben contar con su grado”, agregó.
A un día de que se lleve a cabo la elección en las 14 unidades académicas, Teresa García Gasca dijo que se ha estado trabajando muy de cerca con los directores de las Facultades, siempre apelando a que las actividades académicas no se contaminen con las cuestiones políticas, tal como ha pasado en menor medida en algunas facultades.