Triste celebración a la Santa Cruz

Dentro de la tradición católica cada 3 de mayo se celebra el Día de la Santa Cruz

Alejandro Payán|Diario de Querétaro

  · lunes 4 de mayo de 2020

Vacío y sin gente lució el tradicional templo de la Cruz en el centro histórico|Foto: Hugo Arciniega|Diario de Querétaro

Dentro de la tradición católica cada 3 de mayo se celebra el Día de la Santa Cruz, este año a causa de la pandemia del Covid-19 el templo de La Cruz, principal punto de celebración, lució vacío, prácticamente no se acudió a bendecir su cruz, pero la Iglesia reiteró el mensaje de seguir construyendo una sociedad de paz y armonía.

Martín Lara Becerril, vicario general de la Diócesis de Querétaro reconoció la labor de los trabajadores de la construcción, quienes cada 3 de mayo acuden a los templos a bendecir sus cruces o en sus obras colocan una cruz en lo alto para dar gracias por el trabajo y la salud.

“El 3 de mayo todo mundo lo conocemos como el día de los trabajadores de la construcción, el signo que se utiliza es una cruz que no tiene el Cristo, por lo tanto es el signo de la resurrección una cruz adornada que es el signo del Cristo glorioso que ya venció a la muerte”.

Además de estar cerrado al público a causa del Covid-19, el atrio del templo lucía vacío y sin gente, solo una vendedora de nopales ofrecía sus productos, a pesar de que nadie pasaba por la calle.

Cada año el día de la Santa Cruz cae en tiempo de Pascua y se llama la Cruz Gloriosa, los trabajadores de la construcción se apropiaron de este signo y lo llevan a las obras, lo colocan en lo más alto para que los proteja.

“Es muy común ver en las obras que se están construyendo atada a alguna varilla, a algún muro que ya se levantó siempre una cruz gloriosa, ellos han identificado su trabajo a la cruz de Cristo y lo identifican con ese Cristo glorioso y es algo muy bonito que Cristo resucitado y glorioso sea el signo de una construcción”.

Lara Becerril reconoció el trabajo de los albañiles, herreros, arquitectos e ingenieros, quienes realizan un trabajo discreto pero importante para la sociedad y para sacar adelante las ciudades y edificios que albergan familias, empleos y comercios.

“Gracias a las manos de los trabajadores, nosotros tenemos estos edificios tan bonitos, techos seguros, banquetas hermosas… hoy no podemos bendecir sus construcciones ni sus lugares de trabajo pero desde aquí les enviamos la bendición y oramos desde luego por todos ustedes los que se dedican a este sector de la construcción, tendremos tiempos mejores”.