La violencia política contra las mujeres comprende todas aquellas acciones u omisiones de servidores públicos que se dirigen a una mujer por el simple hecho de ser mujer y se tiene que trabajar para erradicar estas conductas, pronunció la diputada Paloma Arce Islas, integrante de la Comisión de Igualdad de Género y Derechos Humanos en la LIX Legislatura.
Durante su participación en el informe “Igualdad y Justicia: La violencia política por razones de género durante el proceso electoral 2018 en México”, la legisladora precisó que gran parte de las mujeres que participan en procesos electorales, de alguna manera pasan por algún tipo de violencia.
“En ninguna institución pública o privada se debe dar ningún tipo de violencia contra las mujeres que menoscaben o anulen sus derechos político-electorales, incluido el ejercicio del cargo”.
Mientras que la directora ejecutiva del Centro de Investigaciones para la Equidad, Política Pública y Desarrollo, Teresa Pérez Vázquez explicó que este estudio se realizó antes, durante y después de las elecciones, en el que observaron que la violencia en todos los niveles y en todos los estados incrementó en un 276%; además de que se encontró un alto grado de simulación en la paridad; por otra parte, visualizaron que pocos partidos políticos realmente apoyan las candidaturas de sus mujeres.
El resultado de la investigación arrojó que de las mujeres que participaron en la contienda electoral si vivieron violencia electoral, sobre todo al interior de sus partidos, la mayor parte de ellas no realizaron denuncias formales; fue el Partido Morena quien realizó la mayor parte de estas ante las instancias correspondientes y pocas más lo hicieron público solo ante los medios de comunicación.
Pérez Vázquez indicó que se pudo visibilizar que del 100% de los recursos que se les otorgó a los partidos políticos para las campañas políticas, sólo el 5% de este fue para las mujeres y el resto para los hombres; consideró que en la mayoría de estos hubo un desempeño tramposo hacia ellas en la forma de su elección.
Al término de las elecciones se pudo observar que la mayoría de las mujeres que participaron y no ganaron ningún cargo político, desistieron de seguir participando en la política, por lo que considera que debe haber un estímulo para que estas sigan participan dentro de sus partidos y en próximas elecciones; e insistir en las instancias sobre la falta de acceso a la justicia que han tenido las mujeres que vivieron violencia de género durante el proceso electoral.
