Liconsa distribuye cada día alrededor de tres millones de litros de leche líquida y en polvo, lo que se traduce en atención de 6.2 millones de mexicanos, indicó su director general, Abelardo Manso.
En el marco de la Semana Internacional sobre Protección Social, detalló que el programa cuenta con cobertura en zonas urbanas de alta marginación y comunidades rurales e indígenas, donde existe un mayor número de personas con carencias de económicas.
De los más de dos mil municipios atendidos en el país, dijo, en 616 considerados con menor índice de desarrollo humano por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, la leche se ofrece en un peso por cada litro, con lo que se combate la desnutrición y se apoya la economía familiar.
En tanto, la delegada federal de la Sedesol en el Estado de México, Evelyn Osornio, abundó que la entidad es de las más pobladas del país, con 17 millones de habitantes, y los programas sociales son implementados por primera vez en territorio estatal por el número de habitantes.
Así, ejemplificó, el programa de adultos mayores concentra a más de 500 mil beneficiarios, en tanto que Prospera atiende a más de 700 mil beneficiarias, y se operan más de 800 comedores y mil 130 estancias infantiles, lo que representa atención para poco más de 39 mil menores de edad.
La planta metropolitana norte, en Tlalnepantla, Estado de México, cuenta con 74 años de operación y es la más grande del país, al beneficiar a un millón 400 mil personas cada día, explicó el gerente, Aarón López
A su vez, mencionó que se distribuye leche a cinco alcaldías de la capital mexicana, al Estado de México, y de manera adicional elabora 47 mil 500 litros para la lechería de Hidalgo; el lugar puede producir poco más de un millón de litros cada día.
Manso añadió que Liconsa cuenta con 10 plantas procesadoras a nivel nacional y con 47 centros de acopio, donde se compra cerca de 500 millones de litros de leche fresca al año a los pequeños productores.
Además, se adquieren cerca de 700 millones de leche en polvo importada, y mediante estos 47 centros de acopio el producto se distribuye a nivel nacional; los productores a los que se les compra, detalló, son originarios de Jalisco, Chihuahua, Guanajuato, Michoacán y Aguascalientes.
La leche se distribuye en Centros de acopio, luego se lleva a las plantas y desde ahí, a través de las rutas de camiones, se moviliza a cada una de las más de 10 mil lecherías distribuidas en el país, así como a los comedores comunitarios, al programa de Prospera y las tiendas Liconsa.
Además se maneja una línea de leche comercial que tiene un costo más elevado, que es de alrededor de 12 pesos con 50 centavos, lo que representa un menor valor al de la leche comercial, “toda la leche que se maneja para el programa de abasto social es de cerca de 920 millones de litros que se entregan al año”, precisó.
El sector beneficiario está integrado por niños de seis meses a 15 años de edad, mujeres en lactancia y personas con discapacidad, así como adultos mayores, además en las plantas, oficinas generales, y centros de acopio en el país trabajan cerca de cinco mil trabajadores y se atiende a más de ocho mil 500 pequeños productores de leche fresca.
El precio de la leche en 29 estados, explicó, es de cinco pesos con 60 centavos; en Chiapas, Oaxaca y Guerrero es de cuatro pesos con 50 centavos; en tanto que en 616 municipios está en un peso el litro.
De esta manera el gobierno federal, mediante un programa de alimentación trabaja para fortalecer el desarrollo de los infantes y adultos mayores, así como de otros sectores vulnerables.
“Tenemos unas finanzas sanas, recibimos una parte de recursos del gobierno federal, que son cerca de dos mil 500 millones de pesos al año, y un ingreso mayor 8000 millones de pesos de recursos propios, derivados de la venta de leche comercial y crema”.
