Indígenas canadienses se reunirán con el papa a fines de marzo

Se reunirán en el Vaticano para discutir los abusos en las escuelas residenciales administradas por la Iglesia en ese país, señaló un comunicado

AFP

  · martes 1 de febrero de 2022

Foto: AFP

Indígenas canadienses se reunirán con el papa a fines de marzo en el Vaticano


Una delegación indígena de Canadá se reunirá a fines de marzo con el papa Francisco en el Vaticano para discutir los abusos en las escuelas residenciales administradas por la Iglesia en ese país, señaló un comunicado.

El viaje estaba originalmente programado para diciembre último, pero se pospuso ante temores de contagio por la variante ómicron.

Exalumnos de aquellos internados y representantes de la Asamblea de las Primeras Naciones, el Consejo Nacional de Metis y los Inuit Tapiriit Kanatami se reunirán individualmente con el pontífice la semana del 28 de marzo y sostendrán una audiencia colectiva final el 1 de abril.

"Seguimos comprometidos en avanzar hacia la sanación y la reconciliación y esperamos con ansias la oportunidad de que los ancianos indígenas, los guardianes del conocimiento, los sobrevivientes de las escuelas residenciales y los jóvenes se reúnan con el papa Francisco", dijeron los grupos indígenas y el episcopado canadiense en un comunicado conjunto.

La Iglesia Católica busca reconstruir puentes con las comunidades indígenas de Canadá después de que se descubrieran más de 1.300 tumbas sin marcar en las escuelas donde internaban a los niños aborígenes como parte de una política gubernamental de asimilación forzada.

Unos 150.000 niños indígenas fueron llevados desde finales del siglo XIX hasta la década de 1990 a 139 escuelas residenciales, pasando meses o años aislados de sus familias, su idioma y su cultura.

Muchos fueron objeto de abusos físicos y sexuales por directores y maestros, y se cree que miles murieron por enfermedad, desnutrición o negligencia.

Una Comisión de la Verdad y la Reconciliación concluyó en 2015 que aquella política del gobierno canadiense implicó un "genocidio cultural".