Moscú, 29 Dic (Notimex).- Rusia y Turquía acordaron hoy coordinar las operaciones terrestres en Siria después del retiro de las fuerzas de Estados Unidos, y reiteraron su compromiso para trabajar de manera coordinada hasta eliminar todas las amenazas terroristas en ese país.
Los ministros de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, y de Turquía, Mevlut Cavusoglu, sostuvieron este sábado en Moscú consultas de alto nivel sobre Siria, los procesos de paz y político, problemas humanitarios y refugiados, pero en especial la nueva situación en el terreno tras el retiro militar estadunidense.
Ambos cancilleres analizaron los próximos pasos a seguir en Siria y acordaron que continuarán coordinando sus esfuerzos bajo nuevas condiciones en el territorio sirio con el objetivo de finalmente erradicar todas las amenazas terroristas.
“Ankara y Moscú destacaron conjuntamente la necesidad de eliminar todas las organizaciones terroristas en Siria”, declaró Cavusoglu y agregó que Turquía, Rusia e Irán –los tres países garantes de los procesos de Sochi y de Astaná- mantendrán una cooperación estrecha sobre Siria y cuestiones regionales.
En las conversaciones, en las cuales también estuvieron presentes los ministros de Defensa de los dos países, los cancilleres discutieron la forma de cumplir con el memorando firmado en Sochi, Rusia, sobre la creación de una zona desmilitarizada en la provincia siria de Idlib.
El diplomático turco explicó que ese memorándum permitió asegurar de manera considerable la tranquilidad y contribuir al avance del proceso político, y reiteró que Ankara y Moscú respetan la unidad y la integridad territorial siria, por lo que “están dispuestos a hacer frente a todo lo que busque socavar esos principios".
Las partes acordaron también cooperar para acelerar el regreso voluntario de los refugiados a Siria y la creación de las condiciones necesarias para este fin, de acuerdo con reportes del servicio ruso de noticias Sputnik y de la agencia estatal turca de noticias Anadolu.
El ministro Lavrov sostuvo a su vez que Rusia espera que los países occidentales no impidan los futuros esfuerzos de las naciones garantes del proceso de paz de Astaná por crear una Comisión Constituyente siria, acordada entre el gobierno y la oposición de ese país, la cual debe comenzar su labor en Ginebra, Suiza.
Lavrov aseguró que los países garantes seguirán contribuyendo a que el constitucional comience a funcionar lo antes posible, en coordinación con el nuevo enviado especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para Siria, Geir Pedersen, que asumirá a principios de enero.
Las consultas de este sábado fueron “muy provechosas”, dijo y añadió que “en cumplimiento de los acuerdos aprobados por nuestros presidentes (Vladimir Putin, de Rusia, y Recep Tayyip Erdogan, de Turquía) debatimos la lucha antiterrorista, la solución de los problemas humanitarios y el retorno de los refugiados”.
El jefe de la diplomacia rusa indicó además que Moscú y Ankara alcanzaron entendimiento sobre la necesidad de coordinar las acciones de sus representantes militares en Siria, después de que Estados Unidos retire a sus tropas de ese país, movimiento que fue anunciado por el presidente Donald Trump hace unos días.
Tales acciones se llevarán a cabo en estricta correspondencia con la resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU, incluido el respeto incondicional a la soberanía e integridad territorial de Siria.
Siria vive desde mediados de marzo de 2011 un conflicto que comenzó con masivas protestas contra el presidente sirio Bashar al-Assad y se convirtió en una guerra civil en la que las tropas gubernamentales se enfrentan a facciones armadas de la oposición y a grupos terroristas.
