Denuncias anónimas sobre la presunta comisión de actividades ilegales al interior de bodegas en renta en la Central de Abastos derivaron en la realización de un Operativo interinstitucional, en el que participaron la Policía Estatal de Querétaro (PoEs), la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Querétaro (SSPMQ) y la Coordinación Estatal de Protección Civil (CPEQ).
Las denuncias ciudadanas fueron emitidas a la línea de Denuncia Anónima 089 de la Policía Estatal, desplegando un operativo sorpresa, con la aprobación de la Administración de la Central de Abastos.
Al arribar la autoridad, los oficiales realizaron un cateo en cuartos que habían sido rentados a mozos y cargadores que apoyan la labor de los locatarios de la Central de Abastos, los cuales se encuentran en la parte superior de unas bodegas también en renta.
Trascendió que en estos lugares se realizaban presuntas actividades de narcomenudeo, así como de almacenaje de pirotecnia, actividades de trata de personas con fines de explotación sexual, sin que hasta el momento se haya informado si se encontró alguna sustancia o artículo ilícito.
Tras la diligencia, varios sujetos se resistieron a ser inspeccionados quebrantando el orden público, se trataba de 10 hombres y 5 mujeres, quienes fueron detenidos por Policías Municipales y presentados ante el Juzgado Cívico, en todo momento las diversas acciones del operativo se realizaron con la participación de Observadores de la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ).
De acuerdo con algunos testimonios de locatarios, algunos de los detenidos vivían en condiciones de hacinamiento al interior de los cuartos rentados.
Asimismo, un menor de edad fue encontrado en el lugar, en situación de desamparado, por lo que fue canalizado al DIF Estatal para su atención.
Según información de la propia administración de la Central de Abastos, para garantizar el orden y la seguridad al interior de las instalaciones, bodegas, áreas de descarga y locales, se cuenta con18 elementos de seguridad privada enlazados con el Centro de Comunicación y Monitoreo (CECOM) de la Policía Municipal.
Además la Central de Abastos cuenta con 32 cámaras de video vigilancia, distribuidas en áreas estratégicas, lo que ha permitido reducir de 30 a tan sólo 10 robos hormiga de manera diaria de frutas y verduras,
No obstante esto no ha resultado suficiente para restringir el paso de vendedores ambulantes y personas ajenas con fines distintos a la comercialización de frutas, verduras, legumbres y semillas, como es este caso.
La coordinación existente entre la administración de la Central de Abastos y los diferentes cuerpos policiales del estado ha permitido que en los últimos 5 años no se hayan presentado casos de extorsión a comerciantes y locatarios.