Panteón Jardín, entre el esplendor y el descuido
Los visitantes pueden apreciar la última morada de famosos
Redacción
México, (Notimex).- El tradicional Día de Muertos revive en la memoria de los mexicanos a sus seres queridos que no están, es una especial para visitarlos en el panteón, donde se puede ver que con el paso del tiempo, algunas tumbas se encuentran limpias e impecables, pero hay otras que distinguen por el descuido y abandono.
Un claro ejemplo es el Panteón Jardín, pues durante un recorrido efectuado por Notimex se pudo apreciar el esplendor de mausoleos imponentes como el del Jorge Negrete también conocido como "El Charro Cantor”, quien falleció el 5 de diciembre de 1953, o la de Pedro Infante Cruz "El Ídolo de Guamúchil", que luego de su restauración, luce llena de flores y fotografías.
Sin duda, las grandes figuras de la actuación de la Época de Oro del cine nacional, continúan recibiendo muestras de cariño, pues sus criptas y tumbas registran el paso de los fanáticos, que limpian, lavan y ponen flores, especialmente en estas fechas en que la tradición nos obliga a no olvidar a los que se adelantaron, como el impecable sepulcro de Javier Solís.
Otros que tienen sus espacios aseados y completos, quizá por su reciente partida son la del actor Gonzalo Vega y el productor, actor y dramaturgo José Sole Nájera, fallecidos en 2016 y 2017, respectivamente.
Sin embargo otros, grandes de la actuación en México, no han corrido con la misma suerte de ser recordados por siempre, por lo que hoy están en el completo olvido, con tumbas agrietadas, sucias y en el peor de los casos en su destrucción total, como la de Tito Guízar, que en su lápida se lee, “Un gran mexicano”, acaecido en 1999.
La misma suerte corren las tumbas del dramaturgo japonés que hizo carrera en México, Seki Sano, quien dijo antes de morir en 1966: “El Teatro es para verse”; o la de Miguel Manzano Sanz, Toña la Negra, y la del primer actor José Elías Moreno, cuya lápida fue levantada y destruida por las raíces de un árbol.
El recorrido por los pasillos del Panteón Jardín, en especial en la rotonda de la Asociación Nacional de Actores (ANDA), es interesante y a la vez intrigante, a su paso, los visitantes pueden realizar un viaje al pasado por cientos de películas que llegaran a su memoria al descubrir tumbas de:
Pedro Armendáriz, fallecido en 1963; Ángel Garasa Berges, (1976), Julio Jaramillo González, Joaquín Pardavé, Carlos López Moctezuma, este conocido como “El villano más bueno del mundo”, fallecido en 1980; Manolo Fábregas y las tumbas de los hermanos Domingo, Fernando y Andrés Soler.
Además de Elvira Quintana, Luis Pérez Meza, Enrique Rambal, Francisco “El Charro” Avitia, Oscar Ortiz de Pinedo, Mimí Derba, Mary Cruz Olivier y Marcelo Sánchez, entre otros.