En las instalaciones de la delegación del Centro Histórico, arrancaron las fiestas decembrinas con una posada tradicional navideña encabezada por el delegado, Agustín Luna, quien en las instalaciones del palacio municipal dio la bienvenida a cerca de 500 personas.
Faroles de colores y piñatas vistosas de siete picos, enmarcaron la presentación de varios números de danza a cargo del Ballet Costumbrista de la UAQ, y una tradicional pastorela navideña, en la que el público pudo rememorar el relato bíblico del nacimiento de Jesús.
Finalmente, los asistentes degustaron exquisitos tamales, buñuelos dulces, atole caliente y ponche de frutas, en una pequeña kermés en la que, siguiendo la tradición, se rompieron algunas piñatas rellenas de fruta, cacahuates y muchos dulces.
