/ sábado 1 de julio de 2023

El Relox, el paraíso tequisquiapense de la época de oro

Fue un espacio muy visitado por estrellas de la talla de Pedro Infante, Cantinflas, Jorge Negrete, María Félix, Silvia Pinal, Agustín Lara, entre otros 


Hablar del Hotel Relox es remontarnos al cine de la época de oro, donde estrellas como Pedro Infante, Cantinflas, Jorge Negrete, María Félix, Silvia Pinal, entre otros, gustaban de viajar a Tequisquiapan en el estado de Querétaro para disfrutar del agradable clima, las confortable instalaciones y la amistad con la familia Perrusquía dueños del lugar.

Historia constituyente plasmada en los muros de El Relox

Los muros que guarda El Hotel Relox, llevan las constantes visitas del constituyente Venustiano Carranza, al igual que de don Saturnino Osornio, gobernador queretano, pero a decir de su actual dueño, David Dorantes varias historias y leyendas se cuentan acerca de sus instalaciones.

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“Tequisquiapan prácticamente lo refunda don Miguel Michaus casado con doña Guadalupe Velazco de Michaus, quienes a petición de un sacerdote adoptaron a finales del tiempo de la colonia a un huérfano José Miguel Ramón Adaucto Fernández y Félix, quien era originario de Durango y estudiaba en la Ciudad de México la carrera de Leyes, él se convierte en su caporal en lo que era esta hacienda y años después se cambia el nombre a Guadalupe Victoria, para unirse al ejército” afirma Dorantes.

“Esta propiedad con el tiempo pasó a manos de don Ernesto Perrusquía Layseca, quien en tiempos de Francisco I. Madero era el delegado Federal del Timbre (hoy la Secretaría de Hacienda) y toma posesión ya de lo que hoy se conoce como” “El Relox”, luego se convierte en constituyente”.

“La fama de Tequisquiapan se la dio el Hotel Relox, no el municipio a él; aquí se podían ver grandes personalidades de la política en 1917, era habitual que el presidente estuviera en estos lares junto a su gabinete”.

Recuerdo de don Ernesto Perrusquia, constituyente queretano. Foto: Cesar Ortiz | El Sol de San Juan del Río


Llega la época de del cine de oro a Tequisquiapan

En su relato David Dorantes hace mención que el mundo no producía películas y sólo en México se realizaban. “Si ustedes se preguntan ¿Por qué las películas se grababan principalmente en Tequisquiapan?, hay toda una historia, don Ernesto Perrusquía tuvo un hijo en su primer matrimonio que se llamaba Melchor quien estudiaba en Ciudad de México y tenía por compañero de aula a Miguel Alemán, quien tiempo después se convertiría en presidente de la República Mexicana, gracias a su amistad y el talento que poseía Melchor Perrusquía, comenzó a colaborar con él y entre sus primeras encomiendas trazó la carretera y el diseño de lo que hoy se conoce como la costera del Acapulco tradicional (Costera Miguel Alemán). Cuando el joven viajaba a su terruño Tequisquiapan, venía en plan de amigos con el presidente, Pedro Infante, entre otros actores, toreros y políticos de la época y por supuesto se hospedaban en ´El Relox´, para disfrutar de los bellísimos paisajes, conocieran el lugar y este se convirtiera en un gran atractivo para todos estos gremio”.

Al ser “descubierto” este paraíso natural, varios directores de cine y productores comenzaron a ver las bondades que ofrecía Tequisquiapan y empezaron a filmar películas e inspirar a más de uno para componer canciones que hoy son parte del acervo mexicano, “aquí se compusieron varias canciones como “Huapango Torero” – que Tomás Méndez se la escribió a Cristina Perrusquía y se la dio en una servilleta-, “Cruz de olvido", "Cielo Rojo", entre muchas otras más”.

En Tequisquiapan se podían ver caminando a personajes como Agustín Lara quien se hizo muy asiduo del lugar dado a su amistad y mancuerna que hacía con Antonio “ El Chacho” Ibáñez quien se casó con una hija de don Ernesto Perrusquía y prácticamente se la pasaba el tiempo libre en el “Relox”.

“Justamente acabamos de recibir el piano que le perteneciera a Agustín y lo habíamos mandado a restaurar, ya que aquí lo dejó”.

Con toda esta fama que adquirió Tequisquiapan se grabó la primer película “Un Corazón en el Ruedo”, con la participación de Sofía Álvarez y Carlos López Moctezuma, otra joya del cine mexicano fue filmada una parte en Bernal y otra en "El Relox”, “La Cucaracha” con María Félix, quien quedó maravillada de el lugar.

Agustín Lara, encontró su gran inspiración en Tequisquiapan. Foto: Cortesía | Familia Perrusquía

Mario Moreno “Cantinflas” fue otro quien quedó cautivado y filmó en su totalidad “El Profe”, donde todas las escenas fueron grabadas en su totalidad en el “Relox”.

“Aquí se grabaron poco más de 30 películas y algunas telenovelas”, afirmó David Dorantes, quien con orgullo muestra las fotografías, colgada en la pared del inmueble, testigos de grandes momentos que vivió la farándula y la política mexicana en el lugar.

El Relox, un imperdible en Querétaro

Con toda esta historia David Dorantes está por formar el Museo del Relox, donde se exhibirán verdaderas joyas de icónicos personajes que más de una vez estuvieron en sus instalaciones y quedaron enamorados de la magia que brinda el lugar. Además junto con algunos socios y autoridades pretenden impulsar el turismo para que Tequisquiapan siga siendo referente turístico a nivel internacional, como en su gran época de oro, donde “El Relox” era sinónimo del paraíso mexicano.

Pedro Infante era asiduo de pasar largas temporadas en El Relox. Foto: Cortesía | Familia Perrusquía


Hablar del Hotel Relox es remontarnos al cine de la época de oro, donde estrellas como Pedro Infante, Cantinflas, Jorge Negrete, María Félix, Silvia Pinal, entre otros, gustaban de viajar a Tequisquiapan en el estado de Querétaro para disfrutar del agradable clima, las confortable instalaciones y la amistad con la familia Perrusquía dueños del lugar.

Historia constituyente plasmada en los muros de El Relox

Los muros que guarda El Hotel Relox, llevan las constantes visitas del constituyente Venustiano Carranza, al igual que de don Saturnino Osornio, gobernador queretano, pero a decir de su actual dueño, David Dorantes varias historias y leyendas se cuentan acerca de sus instalaciones.

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“Tequisquiapan prácticamente lo refunda don Miguel Michaus casado con doña Guadalupe Velazco de Michaus, quienes a petición de un sacerdote adoptaron a finales del tiempo de la colonia a un huérfano José Miguel Ramón Adaucto Fernández y Félix, quien era originario de Durango y estudiaba en la Ciudad de México la carrera de Leyes, él se convierte en su caporal en lo que era esta hacienda y años después se cambia el nombre a Guadalupe Victoria, para unirse al ejército” afirma Dorantes.

“Esta propiedad con el tiempo pasó a manos de don Ernesto Perrusquía Layseca, quien en tiempos de Francisco I. Madero era el delegado Federal del Timbre (hoy la Secretaría de Hacienda) y toma posesión ya de lo que hoy se conoce como” “El Relox”, luego se convierte en constituyente”.

“La fama de Tequisquiapan se la dio el Hotel Relox, no el municipio a él; aquí se podían ver grandes personalidades de la política en 1917, era habitual que el presidente estuviera en estos lares junto a su gabinete”.

Recuerdo de don Ernesto Perrusquia, constituyente queretano. Foto: Cesar Ortiz | El Sol de San Juan del Río


Llega la época de del cine de oro a Tequisquiapan

En su relato David Dorantes hace mención que el mundo no producía películas y sólo en México se realizaban. “Si ustedes se preguntan ¿Por qué las películas se grababan principalmente en Tequisquiapan?, hay toda una historia, don Ernesto Perrusquía tuvo un hijo en su primer matrimonio que se llamaba Melchor quien estudiaba en Ciudad de México y tenía por compañero de aula a Miguel Alemán, quien tiempo después se convertiría en presidente de la República Mexicana, gracias a su amistad y el talento que poseía Melchor Perrusquía, comenzó a colaborar con él y entre sus primeras encomiendas trazó la carretera y el diseño de lo que hoy se conoce como la costera del Acapulco tradicional (Costera Miguel Alemán). Cuando el joven viajaba a su terruño Tequisquiapan, venía en plan de amigos con el presidente, Pedro Infante, entre otros actores, toreros y políticos de la época y por supuesto se hospedaban en ´El Relox´, para disfrutar de los bellísimos paisajes, conocieran el lugar y este se convirtiera en un gran atractivo para todos estos gremio”.

Al ser “descubierto” este paraíso natural, varios directores de cine y productores comenzaron a ver las bondades que ofrecía Tequisquiapan y empezaron a filmar películas e inspirar a más de uno para componer canciones que hoy son parte del acervo mexicano, “aquí se compusieron varias canciones como “Huapango Torero” – que Tomás Méndez se la escribió a Cristina Perrusquía y se la dio en una servilleta-, “Cruz de olvido", "Cielo Rojo", entre muchas otras más”.

En Tequisquiapan se podían ver caminando a personajes como Agustín Lara quien se hizo muy asiduo del lugar dado a su amistad y mancuerna que hacía con Antonio “ El Chacho” Ibáñez quien se casó con una hija de don Ernesto Perrusquía y prácticamente se la pasaba el tiempo libre en el “Relox”.

“Justamente acabamos de recibir el piano que le perteneciera a Agustín y lo habíamos mandado a restaurar, ya que aquí lo dejó”.

Con toda esta fama que adquirió Tequisquiapan se grabó la primer película “Un Corazón en el Ruedo”, con la participación de Sofía Álvarez y Carlos López Moctezuma, otra joya del cine mexicano fue filmada una parte en Bernal y otra en "El Relox”, “La Cucaracha” con María Félix, quien quedó maravillada de el lugar.

Agustín Lara, encontró su gran inspiración en Tequisquiapan. Foto: Cortesía | Familia Perrusquía

Mario Moreno “Cantinflas” fue otro quien quedó cautivado y filmó en su totalidad “El Profe”, donde todas las escenas fueron grabadas en su totalidad en el “Relox”.

“Aquí se grabaron poco más de 30 películas y algunas telenovelas”, afirmó David Dorantes, quien con orgullo muestra las fotografías, colgada en la pared del inmueble, testigos de grandes momentos que vivió la farándula y la política mexicana en el lugar.

El Relox, un imperdible en Querétaro

Con toda esta historia David Dorantes está por formar el Museo del Relox, donde se exhibirán verdaderas joyas de icónicos personajes que más de una vez estuvieron en sus instalaciones y quedaron enamorados de la magia que brinda el lugar. Además junto con algunos socios y autoridades pretenden impulsar el turismo para que Tequisquiapan siga siendo referente turístico a nivel internacional, como en su gran época de oro, donde “El Relox” era sinónimo del paraíso mexicano.

Pedro Infante era asiduo de pasar largas temporadas en El Relox. Foto: Cortesía | Familia Perrusquía

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