Por Yolanda Longino
CADEREYTA DE MONTES, QRO.- “Me gustaba ir los domingos con mipapá a vender nuestra artesanía a Querétaro porque me daba de 5a 10 centavos para comprar mis golosinas, yo era el más feliz,recuerdo caminar juntos del Mercado de la Cruz a Carrillo cargandocajetes, de ahí hasta el Pueblito y La Cañada, también megustaba mucho ayudarle a elaborar las piezas, hornear y llevarle laleña”, menciono Eugenio Álvarez Gutiérrez de 64 años de edad,artesano dedicado a la elaborar piezas de barro en la comunidad LaMagdalena, Cadereyta.
El trabajo de elaboración de barro ha pertenecido a laFamilia Álvarez por más de cuatro generaciones, conformando latercera por Eugenio y la cuarta su hijo Gustavo quien decidióseguir los pasos de su padre.
“Yo aprendí a trabajar el barro a los 15 años con un vecinoal principio no me salían bien, se rompían los moldes, me salíangruesos, muy disparejos y fue hace 20 años que decidimos mi padrey yo poner nuestro taller que es familiar”, mencionóGustavo.
Para la elaboración de una pieza primero se compra el barro, semuele a palos, para posteriormente tamizarlo en una tela demosquetero y esté listo para prepáralo y mazarlo hasta obteneruna consistencia suave y manejable que permitirá elaborar cada unade las piezas que se desee hacer.
“Todo es muy complicado, el barro es muy celoso hay quetenerle cariño hay que darle su tiempo, no podemos acelerar elproceso ni dejarlo mucho tiempo abandonado”.
Las piezas que ellos elaboran van desde cazuelas de mole yarroz, hasta jarros, molcajetes, platos, servilleteros, saleros,comales, ollas, entre otros.
Finalmente concluyó haciendo un llamado a los habitantes deQuerétaro para que compren sus productos ya que además de serhechos con mucho amor están libres de plomo.