Cada 15 de enero, desde 1983, se celebra en nuestro país el Día del Compositor; esto con la finalidad de reconocer los Derechos de Autor y, de alguna manera, conmemorar la creación de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM), organismo que tiene como objetivo fortalecer el vínculo con los usuarios de la música para consolidar una cultura de la legalidad que impulse a la sociedad y al gobierno mexicano a brindar la debida protección de las obras intelectuales como parte importante del acervo cultural de México.
La SACM abrió sus puertas en nuestro país desde 1945; sin embargo, hasta 1983 se fundó el Sindicato Mexicano de Autores, Compositores y Editores de Música. Armando Manzanero fue uno de los presidentes de la sociedad en el mismo período que emergió el sindicato y se instauró el día festivo, por lo que entonces expresó: “En este mismo momento existen instituciones grandiosas con todo el saber del mundo, pero que sencillamente se niegan a pagar el derecho de autor. Pues esa ha sido la lucha enorme y grande que hemos tenido los compositores, y que hoy siento consolidado en el Día del Compositor, el día de ese señor que hace canciones para los momentos tristes, para los momentos alegres, para los momentos bonitos. El señor compositor y mexicano".
Actualmente, Martín Urieta se encuentra presidiendo el cargo de presidente del consejo directivo de la Sociedad de Autores y Compositores de México. Como parte de la estructura de organización, cada estado posee un delegado estatal que representa a la sociedad y que funge como un vínculo directo con el consejo directivo radicado en la Ciudad de México.
En Querétaro, Iván Isaías Valadés Hidalgo es quien funge el papel de delegado de la SACM y por el Día del Compositor convocó hace unos días a los compositores radicados en el estado a celebrar su día especial en comunidad.
De acuerdo con el delegado, Querétaro es la sede de entre 35 y 40 compositores. Según su declaración, esa es una cifra fluctuante debido a que son una población que se encuentra constantemente en movimiento, pero por lo regular a donde sea que vayan, el gremio se distingue por su sentido de hermandad y por abrir sus puertas a generaciones emergentes.
En entrevista con DIARIO DE QUERÉTARO, el delegado habló sobre los retos que a la fecha impactan en la labor de los compositores mexicanos, su postura respecto la utilización de la Inteligencia Artificial (IA) y la apertura que existe con las juventudes.
- ¿Cuáles son los retos que los compositores mexicanos enfrentan actualmente?
Básicamente son dos desafíos bien importantes. Uno de ellos es el reconocimiento moral de sus obras, porque en muchas ocasiones hemos pasado a segundo término a los compositores en pro del intérprete, que es tan importante como el compositor, pero en esa equidad de importancias de pronto dejamos un poco de lado al compositor.
El segundo desafío, no menos importante, es el reto de poder vivir de lo que ellos hacen: su don de la composición. ¿Esto qué quiere decir? En México no es tan fácil vivir de la recaudación de las regalías por el uso de sus obras. Este es un desafío mayúsculo porque para nadie es un secreto que en México se viven crisis o recesiones y todas las personas tenemos la necesidad de capitalizar ingresos. Nuestros compositores viven realmente de lo que ellos pueden componer, y nosotros como delegados podemos recaudar de todas las empresas, personas físicas, comercios que comuniquen las obras publicadas y que de alguna forma adquieren un beneficio, en algunos casos directo.
Por ejemplo, en algún lugar que se dedique a traer gente para bailar, pues el beneficio es directo. A lo mejor un hotel, donde la música está en las habitaciones es un beneficio indirecto, pero todos ellos, de acuerdo a la Ley Federal del Derecho de Autor, están obligados a hacer el pago de la regalía y el deber de nosotros es recaudarlo. Ese es el desafío, el que podamos nosotros estar al nivel para que ellos [los compositores] puedan sostenerse de esto que son sus creaciones y, además, seguir componiendo para darnos más contenido cultural musical.
- ¿Los retos que se enfrentan en nuestro país son diferentes a los que se viven en el extranjero, por ejemplo, en Estados Unidos?
En el caso de Estados Unidos, y en otros países, son lugares que tienen muy regulado el tema de los Derechos de Autor y que, además, el tema de la obligación de pagar regalías posee muchísima difusión. Todas las personas saben que se tiene que pagar una regalía.
En el caso de México, se cree que se debe vivir “del amor al arte”. Hace falta una cultura y regulaciones que protejan el trabajo de los compositores.
- ¿Consideran que la emergencia o popularización de la IA pueda llegar a agudizar los desafíos que viven los compositores?
Como todo, la Inteligencia Artificial tiene cosas buenas y otras no tan buenas. Al final, si recordamos la Revolución Industrial tan solo podemos decir que la Inteligencia Artificial podría llegar a ocupar el lugar de algunos compositores. Al final, esta herramienta tiene la capacidad de crear, y esa capacidad creativa puede convertirse en un competidor directo.
No obstante, la parte humana que deriva de la emoción, la emotividad con la que alguien puede tener un encuentro o desencuentro amoroso y pasarlo a la música será por siempre insustituible. Yo creo que la Inteligencia Artificial es bienvenida, sobre todo porque podría ayudarnos de alguna manera, pensemos en el último sencillo de los Beatles, pero también requiere de regulaciones para proteger los Derechos de Autor.
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- De lo que ustedes han observado, ¿cómo pinta el panorama para los compositores emergentes? ¿Cómo vienen los jóvenes artistas que dicen: ‘yo quiero vivir de la música’?
Vienen con todo. La verdad es que, como siempre, la juventud se viene imponiendo y es muy bueno como van surgiendo estas colaboraciones de compositores ya establecidos con chicos que van entrando al negocio. Obviamente, como en todo, habrá quienes tengan opiniones diferentes respecto a la música actual, a la música que hoy por hoy se ha popularizado. Pero, dentro de todo esto, creo que los compositores ya de renombre, acogen bien las colaboraciones con los jóvenes y se retroalimentan mutuamente. Es un trabajo de aprendizaje mutuo, los compositores amateurs van aprendiendo de viejas técnicas, consejos y el funcionamiento de la industria, mientras quienes tienen años viviendo de esto, van comprendiendo las nuevas tendencias, el cambio a canciones que se enfocan más en la lírica que en la poesía o la métrica.
Hasta el momento, la delegación estatal no posee una página propia para publicar comunicados o información respecto a la Sociedad de Autores y Compositores de México, ya que tienen que apegarse a lo que se determine desde la sede en la Ciudad de México. Toda información oficial se encuentra en el sitio web: sacm.org.mx
No obstante, la delegación estatal se encuentra ubicada en Calzada Colón #6 en el despacho número tres, en el Centro Histórico de Querétaro, y se pueden comunicar al teléfono 442 157 9958 para cualquier duda o inquietud.
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