La esgrimista queretana Paola Pliego y su hermana Fernanda Herrera tomaron dos caminos paralelos en medio de la crisis del COVID-19, ambas deportistas radicadas en Francia desde hace seis meses y en plena preparación en la Academia Christian Bauer, el entrenador de mayor reconocimiento en el mundo con 76 preseas olímpicas y mundiales.
Hola Lara, mamá de ambas deportistas, informó que Paola decidió permanecer en Francia, junto a una compañera de equipo originaria de Túnez, para no interrumpir sus entrenamientos y para tal efecto se resguardó en los Alpes, lejos de las grandes urbes y “gracias a Dios está sana”.
Por su parte, Fernanda que ha subido al podio en dos competencias internacionales, la primera en Francia y la segunda en Uzbekistán, esta última el pasado 13 de diciembre, en la categoría de cadetes (16 años), regresó el lunes a México procedente de París en compañía de sus abuelos.
Paola, actual representante de Uzbekistán, radicaba en Roma, Italia, en donde llevaba su carrera deportiva, pero decidió hacer un cambio dada la fama de Bauer, ganador de nueve medallas olímpicas y entrenador en jefe de la selección rusa. En tanto, Fernanda, que sigue el mismo plan se preparaba para el Campeonato Mundial Juvenil y de Cadetes que se iba a realizar en Salt Lake City, en la primera semana de abril.
“Fernanda regresó el lunes, estamos todos encerrados, hasta hoy se ve sana y mis papás también que fueron los que estaban con ellas en Francia”, comentó la señora Lara, luego de la importancia de hacer las pruebas de detección del coronavirus con lo cual se podrían evitar muchas muertes. En Corea del Sur hacen pruebas a quién quiera sin bajarse del automóvil y los que dan positivo no salen de sus hogares y desde el principio son atendidos.
Tal es la situación que al regreso de la Copa Mundial de Esgrima en Hungría, los equipos de espada femenil de China y Corea del Sur se contagiaron del coronavirus. Ante la emergencia la Federación Internacional de Esgrima canceló el Mundial Juveniles y todas las Copas del Mundo.
El Grand Prix de Esgrima que se realizaría en Anaheim, en Estados Unidos, programado a partir del 13 de marzo y con los atletas presentes desde el día 11 decidieron cancelarlo y a todos regresaron a sus casas.